29 de septiembre de 2021

SIEMPRE QUE SEAMOS CORDEROS VENCEREMOS.


Evangelio para el jueves 30 de septiembre 2021
Siempre que seamos corderos venceremos
. °°° «Designó el Señor otros setenta y dos y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él. Y les decía: «La mies es abundante y los obreros pocos; rogad, pues, al dueño de la mies que mande obreros a su mies. ¡Poneos en camino! Mirad que os mando como corderos en medio de lobos.” (Lucas 10, 1-12). Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué.
 
            Jesucristo es el prototipo y Maestro de la misión. Si se trata de pensar en la misión, es obligatorio definir la evangelización. No se pude entrar a plantear una misión si no existe la conciencia de lo que implica el máximo mandato del Hijo de Dios: “Vayan por todo el mundo y anuncien mi Palabra”. Evangelizar no se puede reducir a predicar. Jesús anunció el Reino de su Padre, de muchas formas; se compadeció de la gente, los visitó, los acompañó, se dio cuenta de sus necesidades, los curó, estuvo pendiente de todos. Quien evangelice y quien pretenda ser un excelente misionero, tendrá que escuchar las recomendaciones del Hijo de Dios: “No lleven talega, ni alforja, ni sandalias; y no se detengan a saludar a nadie por el camino”. El Evangelio llega a todos los rincones de la tierra, mientras exista una persona convencida de su misión. El discípulo muestra y propone la obra de su Maestro.
 
            El Papa emérito, Benedicto XVI advierte que: San Juan Crisóstomo, en una de sus homilías, comenta: “Siempre que seamos corderos, venceremos y aunque estemos rodeados de muchos lobos, conseguiremos superarlos. Pero si nos convertimos en lobos, seremos derrotados, porque nos faltará la ayuda del Pastor.” El santo Padre tiene toda la razón. No tiene lógica creer que se es un buen evangelizador, cuando se juzga, se limita, se descarta, se trata violentamente a los demás. Jesucristo no vence el mundo con la fuerza de las armas, sino con la fuerza de la Cruz. Sabemos que el Señor es muy radical en su forma de llamar para que cumplamos una misión al interior de su Reino (Mateo 8, 21-22). La mayor exigencia del Salvador del mundo es el camino de la Cruz (Mateo 10, 38). Y un amor que sea superior a cualquier acto generoso y amoroso con nuestros semejantes (Mateo 10, 37).
 
            San Jerónimo, presbítero y doctor de la Iglesia, le dejó un sabio y práctico regalo a la Iglesia Católica, que permaneció durante 15 siglos. Es el autor de la “Vulgata” tradujo a la lengua del latín toda la Sagrada Escritura. El santo logró cumplir perfectamente la misión que Dios le había encomendado, porque asumió con fe y devoción la Palabra de Dios. La Iglesia Católica lo reconoce como un hombre elegido por Dios para explicar la Sagrada Biblia. El Papa Clemente VIII decía que el Espíritu Santo le dio a este gran sabio unas luces muy especiales para poder comprender mejor el Libro Santo. Y el vivir durante 35 años en el país donde Jesús y los grandes personajes de la Santa Biblia vivieron, enseñaron y murieron, le dio mayores luces para poder explicar mejor las palabras del Libro Santo.  Cuida tu salud: Jesucristo vence el mundo con la fuerza de la Cruz.