14 de diciembre de 2020

AQUEL 14 DE DICIEMBRE DE 1974


AQUEL 14 DE DICIEMBRE DE 1974.
“En 120 años de vida diocesana, existe una fecha gloriosa.
Autor: Pbro. Raúl Ortiz Toro. Sacerdote Arquidiócesis de Ibagué.  Quienes conocen en la curia arzobispal de Ibagué la “Sala del trono”, lugar que todas las diócesis de antaño conservan en recuerdo de aquellas épocas en que los señores obispos atendían sedentes en su cátedra las audiencias episcopales, con asistencia de sus caudatarios, quizá han visto una bula pontificia que allí se expone a modo de testimonio. Nada más y nada menos que la Bula Quamquam Ecclesiarum progressus  de San Pablo VI dirigida a la Iglesia de Ibagué un día como hoy, hace 46 años; la “Bula de la madurez eclesial” como suelen llamar a aquel documento que eleva a una diócesis a categoría arquidiocesana y la designa como Iglesia Metropolitana, madre y líder de una provincia. De allí que la efemérides sea digna de recordación y acción de gracias a Dios en nuestra Iglesia Particular de Ibagué.

La Bula expresa que el progreso de la Iglesia (Quamquam Ecclesiarum progressus) exige asimismo dictar provisiones para su mejor administración y acción pastoral de modo que las provincias eclesiásticas tengan una Iglesia principal que presida en “diligencia, trabajo, virtud y prudencia”; por lo tanto, habiendo escuchado en la Santa Sede la propuesta de los obispos colombianos dada a conocer por el señor nuncio apostólico Angelo Palma, el Santo Padre decidió desligar del vínculo sufragáneo a las diócesis de Ibagué y Espinal con respecto a la arquidiocesana de Bogotá y a las diócesis de Garzón y Neiva con relación a la arquidiócesis de Popayán y crear la nueva Provincia Eclesiástica “Ibaguensis nomine” designando como sede principal a la Iglesia de Ibagué “constituida en la dignidad de Iglesia Metropolitana”. En consecuencia, la misma Bula designó como primer arzobispo a Monseñor José Joaquín Flórez Hernández, quien venía ejerciendo el episcopado en Ibagué desde hacía una década.


La Bula está firmada en Roma, junto a San Pedro, “die decimo quarto mensis Decembris, anno Domini millesimo nongentésimo septuagésimo quarto. Pontificatus nostri decimo secundo”. (El día 14 del mes de diciembre del año del Señor 1974, duodécimo de nuestro Pontificado). Transcribo la fecha puesto que hay una particularidad. Conocida la Bula, el Señor Arzobispo Flórez decidió que la mejor fecha para celebrar semejante acontecimiento debía ser el 20 de mayo del año siguiente, 1975, data en que se celebrarían las bodas de diamante de la erección de la diócesis de Ibagué por el papa León XIII (1900). Se confunden las dos fechas pero son acontecimientos tan gloriosos ambos como distintos. Sea esta una ocasión para dar gracias al Buen Pastor por haber permitido que esta Iglesia madura en la fe presidiera en la caridad la labor pastoral de la Provincia Eclesiástica.