12 de noviembre 2019. “¿Por qué, tanto odio en el mundo? En
su homilía de la Misa celebrada en la Casa Santa Marta, este martes, el Papa
Francisco señaló que el demonio “siembra el odio en el mundo, que provoca la
muerte”. Al reflexionar sobre un pasaje bíblico del libro de la Sabiduría, el
Santo Padre destacó que “Dios nos ha creado a su imagen, somos hijos de Dios” y
añadió que “pero por la envidia del demonio la muerte entró en el mundo”.
En esta línea, el Papa explicó que “le envidia del ángel
soberbio quien no quiso aceptar la encarnación” lo llevó a “destruir la
humanidad”.
De este modo, el Pontífice advirtió que así inicia “la lucha
y el deseo de destruir” porque en
nuestro corazón hay “celos, envidia, competencia” en lugar de vivir “como
hermanos, todos en paz”.
“Caín y Abel eran hermanos, pero los celos, la envida de uno
destruyó al otro”, remarcó el Papa quien añadió que basta ver un noticiero para
observar “las guerras, las destrucciones, la gente que por las guerras muere de
enfermedades”.
En este sentido, el Santo Padre recordó en aniversario de la
caída del muro de Berlín en Alemania, el nazismo y las torturas y los otros
horrores de la guerra.
“Detrás de esto hay alguien que nos mueve a hacer estas
cosas. Esto es lo que llamamos tentación. Cuando vamos a confesarnos, le
decimos al padre: ‘Padre, he tenido esta tentación, esta otra, esa otra...’.
Alguien que toca tu corazón para hacerte ir por el camino equivocado. Alguien
que siembra destrucción en nuestros corazones, que siembra odio. Y hoy debemos
decirlo claramente, hay tantos sembradores
de odio en el mundo, que destruyen”, afirmó el Papa.
Por ello, Francisco indicó que en el alma hay “una semilla de envidia del demonio” y
agregó que el demonio tiene envidia “de nuestra naturaleza humana” porque “el
Hijo de Dios se hizo uno de nosotros. Esto no puede tolerarlo, no consigue
tolerarlo”.
“Esta es la raíz de la envidia del demonio, es la raíz de
nuestros males, de nuestras tentaciones, es la raíz de las guerras, del hambre,
de todas las calamidades en el mundo”, advirtió.
Además, el Santo Padre se refirió a la tentación de algunos políticos de “ensuciar al otro, de destruir al
otro” sea con mentiras, que con la verdad y así, no realiza una
confrontación política saludable para el “bien del país”.
“Quisiera que hoy cada uno de nosotros piense: ¿por qué hoy en el mundo se siembra tanto odio? En las familias, que en
ocasiones no pueden reconciliarse, en el barrio, en el lugar de trabajo, en la
política… El sembrador de odio es esto. Por la envidia del demonio la muerte
entró en el mundo. Algunos dicen: pero padre, el demonio no existe, es el mal,
un mal así etéreo. Pero la Palabra de Dios es clara”, exclamó el Papa.
Finalmente, el Santo Padre rezó al Señor para que “haga
crecer en nuestro corazón la fe en Jesucristo, su Hijo” quien tomó nuestra
naturaleza humana "para luchar con nuestra carne y ganar en nuestra
carne" el diablo y el mal. Y que esta fe "nos de la fuerza para no
entrar en el juego de este gran envidioso, el gran mentiroso, el sembrador del
odio". Lectura comentada por el Papa Francisco: Sabiduría 2, 23-3,9.
Fuente: Aciprensa. Mercedes de la Torre.