13 de agosto 2021 "Ya sabe, ¿Qué es la Asamblea Eclesial? Por Padre. Raúl Ortiz Toro – Entre el 21 y el 28 de noviembre de este año 2021, en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, en México, se llevará a cabo de manera presencial la Primera Asamblea Eclesial de América Latina y el Caribe que ha tenido una primera fase iniciada desde el año pasado y que consiste en la escucha atenta a los clamores del Pueblo Fiel – laicos, clérigos y consagrados – a través de distintas plataformas de participación virtual. La Asamblea responde a una necesidad pastoral como lo es la evaluación del camino recorrido desde la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, realizada en Aparecida en el año 2007, y la proyección de un eco pastoral de largo aliento.
El papa Francisco ha querido que, en lugar de convocar una
nueva Conferencia de todos los obispos de este continente, luego de casi 15
años de Aparecida, se haga una valoración de lo logrado hasta el momento y un
relanzamiento de muchos temas que aún están en etapa de desarrollo. Además, se
busca concretar objetivos de orden pastoral para la vivencia de la fe en una
espiritualidad de comunión que promueva discípulos misioneros en la Iglesia con
miras a dos grandes Jubileos: una especie de plan pastoral a nivel continental
con el ánimo de celebrar dentro de una década los 500 años de las Apariciones
de Nuestra Señora de Guadalupe (1531-2031), Emperatriz de América y Estrella de
la Evangelización de este continente, y el Jubileo de la Redención, dentro de
doce años, con motivo de los Dos Milenios del evento fundante y trascendental
de la Muerte y Resurrección de Cristo (33-2033).
Los obispos de nuestro continente, a través de la
coordinación del CELAM, han trazado algunos objetivos fundamentales como, por
ejemplo, lograr que esta Asamblea, la primera de este tipo, sea un “evento
eclesial en clave sinodal y no solo episcopal con una metodología
representativa, inclusiva y participativa”. Ya aquí nos encontramos con una
valiosa interpretación concreta de lo que el Magisterio Pontificio de Francisco
ha querido transmitirnos cuando se refiere a la sinodalidad como “caminar
juntos”: obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, seglares y en general
todos los que hacemos parte de la Iglesia en América Latina y el Caribe: desde
los pequeños monaguillos y los catequistas hasta los señores cardenales,
pasando por clérigos y laicos instituidos en ministerios.
Para lograr que las voces del Pueblo de Dios lleguen a la
Asamblea Eclesial “de Guadalupe” el CELAM ha dispuesto una página de internet
para animar la participación de todos: www.asambleaeclesial.lat; en ella,
pueden participar de distintas maneras en lo que se ha llamado el “proceso de
escucha”, basta con inscribirse en la pestaña “Escucha” con su correo
electrónico y responder algunas preguntas muy básicas; y aunque se había
proyectado que este proceso se cerraría en el mes de julio ahora recibimos la
buena noticia de que se ha ampliado el plazo hasta el 30 de agosto de 2021.
Todos los agentes de pastoral debemos motivarnos para que
este ejercicio de sinodalidad sea aprovechado al máximo: en cada parroquia,
movimiento y realidad eclesial de nuestro continente debería haber, por lo
menos, una persona inscrita en el portal para que, por ejemplo, responda la
encuesta personal o motive en su contexto la participación de otros en la
encuesta grupal o comunitaria; estas encuestas traen preguntas muy valiosas
para descubrir y entender los ejes temáticos sobre los que gira o debería girar
nuestra pastoral. Pienso que incluso el párroco o sacerdote que quisiera
realizar un plan pastoral para su entorno podría inspirarse en esta
metodología; también, en segundo lugar, los inscritos pueden participar
activamente en los foros para los temas propuestos por el “documento para el
camino”, que se puede leer y descargar en pdf en la misma página, o en foros propuestos
por algunos participantes e, incluso, proponer otros foros temáticos de acuerdo
a las inquietudes e intereses pastorales de su entorno.
La idea es que las síntesis de las encuestas y de los foros
hagan parte de la Asamblea Eclesial y que la voz de todos los miembros de la
Iglesia sea un vivo ejemplo de corresponsabilidad y de participación sinodal.
Participar en estos procesos de escucha nos ayuda a entender y apreciar la
universalidad de la Iglesia, a sentirnos partícipes de los destinos de nuestras
comunidades eclesiales a través de una “relectura agradecida de Aparecida para
gestionar el futuro” de modo que se puedan relanzar los grandes temas
propuestos por esta Conferencia Episcopal y que aún tienen vigencia.
Con mirada esperanzadora podríamos aprovechar esta Asamblea
Eclesial para avizorar un nuevo ardor evangelizador en el contexto de la
pandemia de covid-19; aunque todavía la pandemia acompaña el caminar de nuestra
historia, sin embargo, desde ahora, debemos planear proyectos misioneros y evangelizadores
que derriben nuestro letargo y nos pongan nuevamente en sintonía de salida
mientras la humanidad supera esta dura crisis sanitaria. Animémonos a
participar, seamos Iglesia sinodal y corresponsable.
Padre. Raúl Ortiz Toro
Director del Departamento de Doctrina y Promoción de la
Unidad y del Diálogo
Fuente: Conferencia Episcopal de Colombia