19 de marzo 2019. San José es quien tuvo el privilegio de
ser esposo de María, de criar al Hijo de Dios y de ser la cabeza de la Sagrada
Familia. Es patrono de la Iglesia Universal, de una infinidad de comunidades religiosas
y de la buena muerte. "José, hijo de David, no temas recibir a María, tu
esposa, pues lo que en ella ha sido concebido es obra del Espíritu Santo. Dará
a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de
sus pecados" (Mt. 1, 20-21), le dijo el ángel en sueños al “justo” San José.
Con su oficio de carpintero no pudo comprar los mejores
regalos para su hijo Jesús o que recibiera la mejor educación, pero el tiempo
que le dedicó para atenderlo y enseñarle
su profesión fueron más que suficiente para que el Señor conociera el cariño
de un papá, que también es capaz de dejarlo todo por ir en busca del hijo
extraviado. Se conoce a San José como Patrono
de la buena muerte porque tuvo la dicha de morir acompañado y consolado de
Jesús y María. Fue declarado Patrono de la Iglesia Universal por el Papa Pío IX
en 1847. Una de las que más propagó la devoción a San José fue Santa Teresa de
Ávila, que fue curada por intercesión del papá de Jesús en la tierra de una
terrible enfermedad que la tenía casi paralizada y que era considerada
incurable. La Santa le rezó con fe a San José y obtuvo la curación. Luego solía
repetir: "Otros santos parece que tienen especial poder para solucionar
ciertos problemas. Pero a San José le ha concedido Dios un gran poder para
ayudar en todo".
Hacia el final de su vida, la Santa carmelita resaltó:
“durante 40 años, cada año en la fiesta de San José le he pedido alguna gracia
o favor especial, y no me ha fallado ni una sola vez. Yo les digo a los que me
escuchan que hagan el ensayo de rezar con fe a este gran santo, y verán que
grandes frutos van a conseguir". Fuente: Aciprensa. Redacción.
¿Por qué el Papa eligió el
día de San José para iniciar su pontificado hace seis años?
Un día como hoy hace seis años el Papa Francisco inició su
pontificado en la Solemnidad de San José. Conozca las razones por las que el
Pontífice eligió esta fecha, su estrecha relación con el Santo Custodio y cómo
en este tiempo ha extendido su devoción. El martes 19 de marzo de 2013 la Plaza
San Pedro en Roma aclamaba al Papa al inicio de su pontificado. En aquella
ocasión dijo: “doy gracias al Señor por poder celebrar esta Santa Misa de
comienzo del ministerio Petrino en la Solemnidad de San José, esposo de la
Virgen María y patrono de la Iglesia universal: es una coincidencia muy rica de
significado”. “También el Papa, para ejercer el poder, debe entrar cada vez más
en ese servicio que tiene su culmen luminoso en la cruz; debe poner sus ojos en
el servicio humilde, concreto, rico de fe, de San José y, como él, abrir los
brazos para custodiar a todo el Pueblo de Dios y acoger con afecto y ternura a
toda la humanidad”, destacó.
Meses después, el Papa Francisco, a través de un decreto de
la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos,
decidió realizar una pequeña modificación en las oraciones de la Misa para alentar
la devoción a San José. Concretamente, con esta modificación, el Santo Custodio es mencionado en las
Plegarias Eucarísticas II, III y IV de la tercera edición típica del Misal
Romano, colocándose después del nombre de la Virgen María. Posteriormente, en
una ceremonia en la que estuvo acompañado de Benedicto XVI, el Papa Francisco
consagró el Estado de la Ciudad del Vaticano a San José y a San Miguel
Arcángel.
El miércoles 19 de marzo de 2014 se volvió a referir a San
José diciendo que “es el modelo del
educador y del papá, del padre. Así que encomiendo a su protección a todos
los padres, los sacerdotes -que son padres, ¡eh!- y los que tienen un papel
educativo en la Iglesia y en la sociedad”. Durante su viaje a Filipinas a
inicios de 2015, el Pontífice hizo una reflexión sobre las tres lecciones que
da San José a las familias del mundo entero: son el descansar en el Señor en la oración, crecer con Jesús y Santa
María y ser una voz profética en la sociedad.
Allí develó uno de sus secretos mejor guardados. “Yo quiero
mucho a San José porque es un hombre
fuerte de silencio. En mi escritorio tengo una imagen de San José durmiendo
y durmiendo cuida a la Iglesia. Sí, lo puede hacer, lo sabemos”, indicó el
Santo Padre. “Cuando tengo un problema, una dificultad escribo un papelito y lo
pongo debajo de San José para que lo sueñe. Esto significa para que rece por
este problema”, añadió. En el vuelo de regreso de Estrasburgo (Francia) al
Vaticano, tras su visita al Parlamento europeo y al Consejo de Europa, el
Pontífice dijo: “cada vez que le he
pedido algo a San José, me lo ha concedido”.
En el 2016 la Conferencia Episcopal Argentina emitió un
comunicado en el que recordaron “con alegría la emoción de aquella tarde” en la
que el Papa Francisco fue electo como sumo Pontífice. Los obispos destacaron
las palabras del Santo Padre que “nos iluminan y exigen ser ‘Iglesia en
salida’”. Además, explicaron que sus viajes han servido “de consuelo a muchos
pueblos que sufren pobreza y violencia". Finalmente agradecieron Dios por
el don del Papa Francisco y alentaron a las comunidades a rezar por él “para
que prosiga su servicio a la comunión de la Iglesia y como artífice de Paz y
Justicia entre los pueblos”. Fuente: Aciprensa. Redacción.