27 de noviembre 2018. El Papa Francisco invitó a pensar en
el final de la vida, que será “un encuentro con el Señor de misericordia, de
alegría, de felicidad”. Así lo señaló durante la Misa celebrada en Casa Santa
Marta este martes 27 de noviembre. “Es
prudente pensar en el final, nos ayuda a avanzar, a hacer un examen de
conciencia sobre qué cosas debo corregir y cuáles llevar adelante porque son
buenas”, dijo el Papa en su homilía matutina, y sugirió preguntarse: “¿Cómo me
gustaría que el Señor me encontrara cuando me llame?”.
En esta línea, el Santo Padre reflexionó sobre la primera
lectura del día del libro del Apocalipsis, en la que San Juan explica el fin
del mundo como una cosecha en la que “cada uno de nosotros se encontrará con el
Señor”. “Será un encuentro y cada uno le dirá al Señor: Esta es mi vida. Este
es mi trigo. Esta es mi calidad de vida”, una oportunidad para pensar en las
equivocaciones porque “todos cometemos errores”, pero también “todos hacemos
cosas buenas”, insistió. “Tal vez, algunos de ustedes digan: padre, no sea tan
sombrío, que no nos gustan estas cosas... Pero es la verdad”, exclamó el Papa
quien preguntó: “¿Qué diría yo si hoy el Señor me llamara?”. Una cuestión que
no toma en cuenta edades ya que, como recordó, “nadie tiene una vida asegurada. Lo que sí es seguro es que todos
tendremos un final. ¿Cuándo será eso? Sólo Dios lo sabe”, precisó.
De este modo, el Papa Francisco animó a pensar durante esta
semana en el final, en que si el Señor llamara hoy, qué le diría. “El
pensamiento del fin nos ayuda a avanzar. No es un pensamiento estático: es un
pensamiento que avanza porque se lleva adelante por la virtud, por la
esperanza. Sí, habrá un fin, pero ese fin será un encuentro: un encuentro con
el Señor”. Aseguró, también, que “será un rendir cuentas de lo que he hecho,
pero también será un encuentro de misericordia, de alegría, de felicidad. Pensar en el fin, el fin de la creación, el
fin de la propia vida, es sabiduría. El sabio lo hace”, destacó.
Examen de conciencia
Al finalizar, el Santo Padre sugirió hacer un examen de
conciencia para evaluar: “¿Qué cosas debo corregir, porque no están bien? ¿Qué
cosas debo reforzar y continuar porque son buenas? Cada uno de nosotros tiene
muchas cosas buenas, y en este pensamiento no estamos solos: Ahí está el
Espíritu Santo que nos ayuda”, subrayó. “Esta semana le pedimos al Espíritu
Santo la sabiduría del tiempo, la sabiduría del fin, la sabiduría de la
Resurrección, la sabiduría del encuentro eterno con Jesús, para hacernos entender
esta sabiduría que está en nuestra fe”, porque, concluyó: “El encuentro con
Jesús será un día de alegría”. Fuente:
Aciprensa. Redacción. El Papa Reflexionó sobre Apocalipsis 14, 14-19