4 de junio 2018. Al recibir en audiencia a la fundación que
promueve el Premio de Periodismo internacional “Biagio Agnes”, el Papa
Francisco previno sobre anteponer los intereses personales a la hora de
informar y pidió que los periodistas sean fieles a la verdad. “Ser periodista
es un trabajo exigente que tiene que ver con la formación de las personas, de
su visión del mundo y de sus actitudes ante los eventos”, dijo a los 70
integrantes de la Delegación de este premio internacional.
Alabó a este grupo porque “haciendo tesoro de su enseñanza”
se empeñen “ante todo personalmente, para una comunicación que sepa anteponer
la verdad a los intereses personales o de corporaciones” y con el premio
“ustedes señalan a la sociedad periodistas que se distinguen por
responsabilidad en el ejercicio de la profesión”.
Francisco afirmó que “es necesario ser muy exigentes con sí
mismos para no caer en la trampa de las lógicas de contraposición por intereses
o por ideologías”. “Es siempre más urgente apelarse a la sufrida y fatigosa ley
de la búsqueda profundizada, de la confrontación y, si es necesario, del
‘callar’ antes que herir a una persona” o “deslegitimar un evento”, dijo. El
Papa tildó al periodismo de “un trabajo exigente” que ha cambiado en los
últimos años por el continente digital y alertó de que “las dinámicas de los
medios de comunicación y del mundo digital cuando se vuelven omnipresentes, no
favorecen el desarrollo de una capacidad de vivir con sabiduría, de pensar en
profundidad, de amar con generosidad”.
“A menudo se ve, en los viajes apostólicos o en otros
encuentros, una diferencia en la forma de producir: desde los clásicos equipos
televisivos, hasta chicos y chicas que con un Smartphone saben confeccionar una
noticia para algún portal. O también desde las radios tradicionales a
verdaderas entrevistas hechas siempre con el celular”, puso a modo de ejemplo. Por
último, a su parecer, el periodista “trata de abrir espacios de esperanzas
mientras se denuncian situaciones de degradación y de desesperación” y está
llamado a “tener abierto un espacio de salida, de sentido, de esperanza”.
Fuente: Aciprensa, Redacción.