17 de mayo de 2025

EL AMOR PROPUESTO POR DIOS Evangelio domingo 18 de mayo 2025


EL AMOR PROPUESTO POR DIOS ES UNIVERSAL 
                               
Evangelio domingo 18 de mayo 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Cuando salió Judas del cenáculo, dijo Jesús: — Ahora es glorificado el Hijo del Hombre y Dios es glorificado en él. Si Dios es glorificado en él, también Dios le glorificará a él en sí mismo; y pronto le glorificará.Hijos, todavía estoy un poco con ustedes. (…) Un mandamiento nuevo les doy: que se amen unos a otros. Como yo los he amado, amaos también unos a otros.
En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si os tenéis amor unos a otros.” Juan 13, 31-33ª. 34-35.
 
            Los intérpretes de la Sagrada Escritura coinciden en decir que el “Amor” es el testamento de Jesús de Nazareth y el signo de un cristiano. Jesucristo habla de su propia glorificación desde el momento de la pasión y propone un mandato que es nuevo y quizás podríamos decir revolucionario. “Amar a todas las personas”. Esto implica decir que, en la mente de un creyente, de un misionero, de un discípulo, de un ministro, de un consagrado, no debería existir la posibilidad de despreciar a los demás.
 
Cuando Jesucristo habla de amor, lo hace con el sentido universal. Esto indica que serían las personas de toda raza, lengua, nación, profesión religiosa. El amor según el Maestro de Nazareth debería ser universal.  Al contrario. Quienes piensan estar bien solo con los que comparten sus pareceres, su religión, su estatus o quizás sus caprichos, el Maestro les preguntará, ¿qué tiene de novedoso cuando una persona solo ama a quien está de acuerdo con ella.?   
 
            Existen claves para poder amar ante las adversidades de este mundo. De las personas, de los falsos amigos, de aquellos que te adulan, de aquellos que aparentan el amor. El Hijo de Dios recomienda: Hay que aprender a vivir en el mundo sin dejarse contaminar del mundo. Quien anuncia y defiende la Palabra de Cristo resucitado, debe estar listo a la crítica y a la persecución. Quien se conserva como siervo de Cristo nunca tendrá el problema de sentirse más que su “Señor”.
 
La Escritura nos recuerda: “Amen a sus enemigos y oren por los que los persiguen” (Mateo 5, 44). “Bendigan y no maldigan. Gocen con los que gozan. Lloren con los que lloran. Tengan el mismo sentir unos con otros. No sean altivos, sino condescendientes y humildes. No sean sabios en su propia opinión”. (Romanos 12, 14-21). “Todo lo que ustedes hagan, háganlo por amor”. (1 Corintios 16, 14).  “Que el amor sea sin hipocresía; aborreciendo lo malo, aplicando lo bueno” (Romanos 12, 9).
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https://youtu.be/CtG-bHd4xr8