25 de mayo de 2025

EL MES DE JUNIO NOS ENRIQUECE ESPIRITUALMENTE Año 2025


EL MES DE JUNIO NOS ENRIQUECE ESPIRITUALMENTE
EN NUESTRA IGLESIA CATÓLICA
AÑO 2025
El mes de junio está dedicado especialmente al Sagrado Corazón de Jesús, para recordar el amor fiel e incondicional de Cristo por la humanidad.  La devoción al Corazón de Jesús ha existido desde que los primeros cristianos meditaban sobre el costado y el corazón abierto del Señor.
Es cierto que este mes nos enriquece espiritualmente, precisamente celebramos 6 solemnidades y una fiesta. He organizado unos apuntes que pueden ser útiles para nuestra vida espiritual en este mes del sagrado Corazón. Pbro. Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué.La devoción al Sagrado Corazón de Jesús tiene su origen en Santa Margarita María Alacoque, una religiosa de la orden de la visitación, quien tenía un gran amor por Jesús. Se le apareció en varias ocasiones para decirle lo mucho que la amaba a ella y a todas las personas y lo mucho que le dolía a su Corazón que las personas se alejaran de Él por el pecado.
Durante estas visitas a su alma, Jesús le pidió que nos enseñara a quererlo más, a tenerle devoción, a rezar y, sobre todo, a tener un buen comportamiento para que su Corazón no sufra más con nuestros pecados.
 
EXISTEN UNAS PROMESAS DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS
Jesús le prometió a Santa Margarita de Alacoque que si una persona comulga los primeros viernes de mes, durante nueve meses seguidos, le concederá lo siguiente:
 
1. Les daré todas las gracias necesarias a su estado (casado(a), soltero(a), viudo(a) o consagrado(a) a Dios).
2. Pondré paz en sus familias.
3. Los consolaré en todas las aflicciones.
4. Seré su refugio durante la vida y, sobre todo, a la hora de la muerte.
5. Bendeciré abundantemente sus empresas.
6. Los pecadores hallarán misericordia.
7. Los tibios se harán fervorosos.
8. Los fervorosos se elevarán rápidamente a gran perfección.
9. Bendeciré los lugares donde la imagen de mi Corazón sea expuesta y venerada.
10. Les daré la gracia de mover los corazones más endurecidos.
11. Las personas que propaguen esta devoción tendrán su nombre escrito en mi Corazón y jamás será borrado de Él.
12. La gracia de la penitencia final: es decir, no morirán en desgracia y sin haber recibido los Sacramentos.   Fuente: Catholic. Net
 
¿QUÉ NOS ENSEÑA EL PAPA FRANCISCO?
Según la cuarta encíclica de su pontificado, el santo padre propone el Sagrado Corazón de Jesús como la síntesis del Evangelio. La Encíclica DILEXIT NOS “Nos amó” Sobre el amor humano y divino del corazón de Jesucristo. Promulgada el 24 de octubre del 2024. El Papa destaca la importancia de volver a entender nuestra fe, nuestra Iglesia, nuestra misión, nuestra vida pastoral, de acuerdo al corazón de Cristo.
 
El corazón es el lugar de la sinceridad, donde no se puede engañar ni disimular. Suele indicar las verdaderas intenciones, lo que uno realmente piensa, cree y quiere, los “secretos” que a nadie dice y, en definitiva, la propia verdad desnuda (Numeral 5)
 
La imagen del corazón debe referirnos a la totalidad de Jesucristo en su centro unificador y, simultáneamente, desde ese centro unificador debe orientarnos a contemplar a Cristo en toda la hermosura y riqueza de su humanidad y de su divinidad. (Numeral 55)
 
La devoción al Corazón de Jesús es marcadamente cristológica, es una contemplación directa de Cristo que invita a la unión con él. Esto es legítimo si tenemos en cuenta lo que pide la Carta a los Hebreos: correr nuestra carrera “con los ojos fijos en Jesús” (cfr. 12, 2) (Numeral 70)
 
San Juan Pablo II, el Corazón de Cristo es «la obra maestra del Espíritu Santo».  No es sólo cosa del pasado, pues «en el Corazón de Cristo es continua la acción del Espíritu Santo, a la que Jesús atribuyó la inspiración de su misión (cf. Lucas4,18) (Numeral 75)
 
EL MES DE JUNIO NOS ENRIQUECE ESPIRITUALMENTE
CELEBRAMOS LAS SOLEMNIDADES TRASCEDENTES DE NUESTRA FE.
 

Nuestra primera solemnidad, Jesús asciende al Reino de los cielos
, corona su misión, 40 días después de su resurrección.
Podemos reflexionar los siguientes texto bíblicos
Hechos 1, 1-11 Salmo 47 Efesios 1, 17-23 Lucas 24, 46-53
 
EL MAESTRO ASCIENDE Y SUS MENSAJEROS
SE DEJAN GUIAR POR EL ESPÍRITU DE DIOS
Domingo 1 de JUNIO 2025
 
Detenemos nuestro pensamiento en un misterio glorioso del Maestro de Nazareth. De acuerdo a la Escritura, después de 40 días de apariciones del Hijo de Dios a sus seguidores y complementando con sus enseñanzas para que todos nos dejemos guiar por el Espíritu de Dios, el Salvador del mundo asciende al cielo como estaba planeado en el programa de su Padre Dios.
Este momento de la Ascensión nos permite parodiar el acontecimiento Veterotestamentario del pueblo de Israel: fueron 40 días de su éxodo en el desierto hasta llegar a la tierra prometida. “Moisés permaneció en el monte cuarenta días y cuarenta noches.” (Éxodo 24, 18). Elías caminó cuarenta días y cuarenta noches hasta llegar al monte Horeb.” (1 Reyes 19, 8).
 


Nuestra segunda solemnidad, 50 días después de la resurrección
celebramos la venida del Espíritu Santo sobre la Iglesia naciente.
Podemos reflexionar los siguientes textos bíblicos
Hechos 2, 1-11 Salmo 104 1 Corintios 12, 3b-7. 12-13 Juan 20, 19-23
 
NADA PODEMOS HACER
SI NO ES CON LA AYUDA Y GRACIA DEL ESPÍRITU SANTO
Domingo 8 de junio 2025
 
Quedamos convencidos que nada podemos hacer si no es con la ayuda, la presencia y la asistencia del Espíritu Santo. (cfr. 1 Corintios 12, 3). La obra del Maestro de Nazareth continúa su rumbo gracias al Espíritu del Padre celestial. Lo que no entendemos, lo que no podemos, aquello que causa desacierto, encontrará su solución gracias a la asistencia del Espíritu Santo.  Será el que consolará, asistirá, defenderá, protegerá a los Apóstoles, a la Iglesia y a nosotros mismos. Es el culmen de la obra de Cristo y el inicio de la misión de nosotros como Iglesia.
 
¿Quién debe ser el Espíritu para cada uno de nosotros? El Espíritu es principio de fe “nadie puede decir que Jesús es el Señor, sino iluminado por el Espíritu Santo.” El Espíritu es principio de conocimiento sobrenatural: El Espíritu Santo que el Padre enviará en mi nombre, os lo enseñará todo. El Espíritu es principio de santificación.
 
 

Nuestra tercera fiesta, celebra la síntesis de la obra sacerdotal de Jesucristo. Él es sumo y eterno sacerdote
. Es la jornada por la santificación de los sacerdotes.
En consonancia con la Carta a los Hebreos podemos decir que: “Cristo ha venido como sumo sacerdote de los bienes definitivos.” (Hebreos 9, 11).
Podemos reflexionar los siguientes textos bíblicos:
Isaías 6, 1-4. 8 Salmo 22 Juan 17, 1-2. 9. 14-26
 
El sacerdocio va en comunión plena con Jesucristo. El apóstol afirmaba: “Ustedes, en cambio, son una raza elegida, un sacerdocio real, una nación santa, un pueblo adquirido para anunciar las maravillas de aquel que los llamó de las tinieblas a su admirable luz. (1 Pedro 2, 9).
La Escritura define en qué consiste el sumo sacerdocio. Dice el libro sagrado: “Teniendo, pues, tal Sumo Sacerdote que penetró los cielos -Jesús, el Hijo de Dios- mantengamos firmes la fe que profesamos. Pues no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino probado en todo igual que nosotros, excepto en el pecado. Acerquémonos, por tanto, confiadamente al trono de gracia, a fin de alcanzar misericordia y hallar gracia para una ayuda oportuna" (Hebreos 4, 14-16).
 
El Papa Francisco nos enseña: “Jesús es el único Sumo Sacerdote del Nuevo Testamento, pero en Él también todo el pueblo santo de Dios fue constituido pueblo sacerdotal. Sin embargo, entre todos sus discípulos, el Señor Jesús quiere elegir a algunos en particular, para que ejerciendo públicamente en la Iglesia en su nombre el oficio sacerdotal a favor de todos los hombres, continuara su misión personal de maestro, sacerdote y pastor. (cfr. Homilía, 22 de abril, 2018).
 
EL SACERDOCIO ES OBRA DE DIOS, VIENE DE DIOS, LO SOSTIENE DIOS Y EL MISMO DIOS PRESENTA SU SER Y SU RAZÓN DE SER
Jueves 12 de junio 2025
 
Jesucristo es el ejemplo del verdadero sacerdocio. Nadie puede auto nombrarse sacerdote, sino que es Dios mismo quien propicia en cada hombre ser su representante, su sacerdote, su ministro. Jesucristo tampoco se autonombra sacerdote, sino que el mismo Padre celestial le dice “Hijo mío eres tú; yo te he engendrado hoy”. Cristo se convierte en causa de salvación eterna para todos aquellos que crean en Él. (cfr. Hebreos 5, 4-7). Nuestra Iglesia católica nos enseña que todos participamos del sacerdocio de Cristo. (cfr. Catecismo Iglesia Católica, 1547)
 

Nuestra cuarta solemnidad, nos recuerda el misterio central de la fe
y la vida cristiana. La Santísima Trinidad.  
Podemos reflexionar los siguientes textos bíblicos
Proverbios 8, 22-31 Salmo 8 Romanos 5, 1-5 Juan 16, 12-15
Domingo 15 de junio 2025
 
EL MISTERIO CENTRAL DE NUESTRA FE
ESTÁ EN LA SANTÍSIMA TRINIDAD
Cuando se trata de hablar de la Santísima Trinidad debemos decir que es el misterio central de nuestra Fe. Todas las acciones sacramentales y bendicionales, están en nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu. Los Concilios de Nicea, año 325 y Constantinopla, año 381, definieron en nuestra Iglesia la unidad y la divinidad de las tres personas.
 
            La Escritura nos enseña que existe un solo Dios. El profeta que predicó en el norte de Israel afirmaba: "Ustedes son mis testigos, dice Yahvé, y son mi servidor, que he elegido; sépanlo, pues, y crean en mí, y comprendan que Yo Soy. Ningún Dios fue formado antes de mí, y ningún otro existirá después”. (Isaías 43, 10).

            El Papa Francisco explica la Santísima Trinidad con el misterio del amor. “El apóstol y evangelista san Juan resume toda la revelación diciendo: «Dios es amor» (1 de Juan 4, 8. 16). El Padre es amor, el Hijo es amor, el Espíritu Santo es amor. Y en cuanto es amor, Dios, aunque es uno y único, no es soledad sino comunión, entre el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Porque el amor es esencialmente don de sí mismo, y en su realidad originaria e infinita es Padre que se da generando al Hijo, que a su vez se da al Padre, y su amor mutuo es el Espíritu Santo, vínculo de su unidad. No es fácil entenderlo, pero se puede vivir este misterio; todos nosotros; se puede vivir tanto.” (cfr. Ángelus, 30 de mayo, 2021).
 
 

Nuestra quinta solemnidad nos permite honrar, verdadera, real y sustancialmente la presencia de Cristo en la Eucaristía
. “Corpus Christi”
Podemos reflexionar los siguientes textos bíblicos:
Génesis 14, 18-20 Salmo 110 1 Corintios 11, 23-26 Lucas 9, 11b-17 
Domingo 22 de junio 2025
 
NUESTRA IGLESIA SE ALIMENTA Y VIVE DE LA EUCARISTÍA
La Escritura nos recuerda: “El que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en Mí y yo en él.” (Juan 6, 56).
            Teniendo en cuenta el milagro de Bolsena a mediados del siglo XIII el Papa Urbano IV en su tercer año de pontificado, encontrándose en Orvieto, el 11 de agosto de 1264, instituye la fiesta del Corpus Christi, con la Bula: “transiturus de hoc mundo” a punto de irse de este mundo. Hace eco a la última cena y a la despedida de Jesús antes de su pasión y muerte. Dijo el santo Padre: “Cristo, nuestro salvador, estando para partir de este mundo para subir al Padre, poco antes de su Pasión, en la Ultima Cena, instituyó, en memoria de su muerte, el sumo y magnífico sacramento de Su Cuerpo y Su Sangre, dándonos el Cuerpo como alimento y la Sangre como bebida.”
 
La Eucaristía es el sacramento de los sacramentos. Así lo aprendemos del Catecismo de la Iglesia Católica (cfr. 1169.  Un pan ázimo y una copa de vino, han logrado transformar la mentalidad de hombres y mujeres que le han creído a Jesús Eucaristía, pan de vida eterna, cáliz de eterna salvación.  Hagan eso en memoria mía: es el consejo sabio del máximo presidente de la Eucaristía, nosotros le respondemos: así es Señor, sólo tú, tienes palabras de vida eterna. “Acudían asiduamente a la enseñanza de los apóstoles, a la comunión, a la fracción del pan y a las oraciones.» (Hechos 2, 42).
 
            El Papa Francisco nos enseñó que la Eucaristía es verdadero alimento que nos sacia. “"Quien recibe con fe el Cuerpo y la Sangre de Cristo no solo come, sino que es saciado. Comer y ser saciados: se trata de necesidades fundamentales que en la Eucaristía son respondidas". "Mientras come, la multitud se da cuenta de Jesús cuida todo. Este es el Señor presente en la Eucaristía: nos llama a ser ciudadanos del Cielo, pero tiene en cuenta el camino que debemos afrontar aquí en la tierra. Si tengo poco pan en la bolsa, Él lo sabe y se preocupa" "nuestra adoración eucarística se hace concreta cuando cuidamos al prójimo, como lo hace Jesús". (cfr. Ángelus, 19 de junio, 2022).
 

Nuestra sexta solemnidad nos recuerda a Aquel que preparó el camino para Cristo antes de iniciar su ministerio público
. Natividad de san Juan Bautista.
Podemos reflexionar los siguientes textos bíblicos:
Isaías 49, 1-6. Salmo 139 Hechos 13, 22-26 Lucas 1, 57-66.80
Martes 24 de junio 2025
 
UN MODELO PERFECTO DE DISCÍPULO
Según nuestra liturgia católica, sabemos que la Iglesia celebra la natividad del Señor, la natividad de María Santísima y la natividad del precursor de Jesucristo, san Juan Bautista. Jesucristo se refirió a san Juan el Bautista diciendo: “Este es aquel de quien está escrito: He aquí, envío mi mensajero delante de ti, el cual preparará tu camino delante de ti.
 
De cierto os digo, que entre los nacidos de mujer no se ha levantado ninguno mayor que Juan el Bautista; sin embargo, el más pequeño en el reino de los cielos ha sufrido violencia, y los violentos lo arrebatan. Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan; y si estáis dispuestos a aceptarlo, es Elías el que ha de venir. El que tenga oídos para oír, que oiga”. (Mateo 11, 10-15)
 
Dios prepara y dispone la humanidad para la llegada de su Hijo como Salvador y Redentor. Un hombre a quien los historiadores eclesiásticos lo denominan “El testigo de la verdad” nacido de Isabel y Zacarías, cumple perfectamente su misión como precursor del Maestro de Nazareth.  Se trata de san Juan Bautista. el enviado por Dios para prepararle el camino al Salvador. Por lo tanto, es el último profeta, con la misión de anunciar la llegada inmediata del Salvador. Es el modelo perfecto de un discípulo, quien se preocupa por presentar a su Maestro e indicarle a la humanidad la identidad de Jesucristo: “Él es el cordero de Dios que quita el pecado del mundo”.
 
 

Nuestra séptima solemnidad. Recordamos los dos grandes apóstoles en nuestra Iglesia: Pedro y Pablo
. Hoy es también el día del Papa.
Podemos reflexionar en los siguientes textos bíblicos:
Hechos 12, 1-11 Salmo 34; II Timoteo 4, 6-8. 17-18 Mateo 16, 13-19. 
Domingo 29 de junio 2025
 
DOS GRANDES APÓSTOLES, DOS GRANDES COLUMNAS
DOS GRANDES TESTIGOS DE LA IGLESIA   
Pedro y Pablo son considerados pilares y columnas en la Iglesia Católica
El Papa Benedicto XVI nos recordaba: “La tradición cristiana siempre ha considerado inseparables a San Pedro y a San Pablo: juntos, en efecto, representan todo el Evangelio de Cristo… Aunque humanamente muy diferentes el uno del otro, y a pesar de que no faltaron conflictos en su relación, han constituido un modo nuevo de ser hermanos, vivido según el Evangelio, un modo auténtico hecho posible por la gracia del Evangelio de Cristo que actuaba en ellos. Sólo el seguimiento de Jesús conduce a la nueva fraternidad” (cfr. Homilía, 29 de junio, 2012).
 
El Papa Francisco nos pregunta: “A la luz de esta experiencia de los santos apóstoles Pedro y Pablo, cada uno de nosotros puede preguntarse: cuando profeso mi fe en Jesucristo, el Hijo de Dios, ¿lo hago con la conciencia de que siempre debo aprender, o presumo que "ya lo tengo todo resuelto"? Y de nuevo: en las dificultades y pruebas, ¿me desanimo, me quejo, o aprendo a hacer de ellas una oportunidad para crecer en la confianza en el Señor? Porque él —escribe Pablo a Timoteo—nos libra de todo mal y nos lleva con seguridad al cielo (cf. 2 Timoteo 4, 18). Que la Virgen María, Reina de los Apóstoles, nos enseñe a imitarlos avanzando día a día por el camino de la fe.” (cfr. Ángelus, 29 de junio, 2022).
 
Como hoy es el día del Papa démosle gracias a Dios por nuestro Papa actual: LEÓN XIV
El Papa número 267 en nuestra Iglesia Católica. El eminentísimo cardenal, Robert Francis Prevost, el nuevo Papa León XIV ha tomado este nombre para guiar los destinos de la Iglesia Católica. Nuestro sencillo, admirable, sabio, excelente pastor de almas, muy buen diplomático, un gran hombre de Dios, nació en Chicago (Illinois) (USA) en el año 1955. El santo Padre es nacido en Estados Unidos, tiene nacionalidad Peruana. Fue prefecto para el dicasterio de los obispos y presidente de la pontificia comisión para América Latina.
 
Nuestro apreciado Papa recibió su formación en el Seminario de los Padres Agustinos. Es una comunidad mendicante con 781 años de historia y vocación misionera. “La Orden de San Agustín, también conocida como Orden de Ermitaños de San Agustín (O.E.S.A.), se fundó en 1244 bajo el pontificado del Papa Inocencio IV, unificando varias comunidades de ermitaños que seguían la Regla de San Agustín. Estos ermitaños fueron reconocidos como frailes mendicantes. La Orden se inspiró en la vida y doctrina de San Agustín de Hipona, y su objetivo principal es la santificación de sus miembros y el servicio a la Iglesia.”