10 de junio de 2025

SERVIR DESINTERESADAMENTE Evangelio miércoles 11 de junio 2025


QUIEN LE SIRVE A DIOS LO HACE DESINTERESADAMENTE  

Evangelio miércoles 11 de junio 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Dijo Jesús a sus apóstoles: «Vayan y anuncien que el reino de los cielos está cerca. Curen enfermos, resuciten muertos, limpien leprosos, saquen demonios. Lo que han recibido gratis, denlo gratis. No llevéis en l a faja oro, plata ni calderilla; ni tampoco alforja para el camino, ni túnica de repuesto, ni sandalias, ni bastón; bien merece el obrero su sustento.
 
Cuando entréis en un pueblo o aldea, pregunten quién hay allí de confianza y quédense en su casa hasta que se vayan. Al entrar en una casa, saluden; si la casa se lo merece, la paz que le desean vendrá a ella. Si no se lo merece, la paz volverá a ustedes.» Mateo 10, 7-13.
 
            ¿Cuál es la misión que debemos cumplir, según el Maestro de Nazareth?  La respuesta es clara y evidente. Lo primero es que cada persona asume dicha misión libre y voluntariamente. Si lo hace desde el campo de la libertad, tendrá muchos frutos dicha misión. Lo segundo es el tema central, que consiste en el Reino de Dios. Si se trata de hablar del Reino, es proponer un sistema de vida donde Reine el amor, Reine la paz, Reine la justicia, Reine la caridad, Reine la hermandad, Reine el perdón combinado con la misericordia. Lo tercero es la asistencia a la comunidad.
 
Quien es discípulo debe ser un servidor de la comunidad, alguien que pone sus talentos, carismas, dones al servicio de los demás. Lo cuarto es el desprendimiento económico para poder servir sin distinciones. La Escritura nos recuerda que, si todo lo hemos recibido de Dios, la pregunta sería, por qué este discípulo está interesado más en lo económico y menos en la misión.
 
El Papa Francisco advierte que “El diablo entra por el bolsillo”. El apóstol san Pablo propone pensar en un servidor de Dios en una sociedad, donde merece lo necesario. (cfr. 1 Timoteo 5, 17-18). La raíz de todos los males es el amor al dinero. (1 Timoteo 6, 10)
 
            El servicio como vocación es la virtud que debe distinguir a todo creyente que desee ser discípulo misionero del Maestro de Nazareth. Cuando el servicio es el ideal en la fe y en la vida cristiana el resultado es un buen apóstol de Jesucristo. El mismo Maestro le dio la trascendencia al servicio recomendándolo y diciendo: Si alguno quiere ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos” (Marcos 9, 35)
 
Un buen servicio exige el cultivo de los valores. Si alguien me quiere servir, que me siga. cfr. Juan 12, 26. Quien le sirva a Dios lo honrará el Padre celestial. cfr. Juan 12, 26. El Hijo de Dios vino para servir al mundo. cfr. Marcos 10, 45.
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https://youtu.be/B9WpwSoQaCo