1 de marzo de 2019

EL SENTIDO Y LA ESTRUCTURA DEL RITO DE ENTRADA. Catequesis Mistagógica


1 de marzo 2019. EL SENTIDO Y LA ESTRUCTURA DEL RITO DE ENTRADA
Continuando con nuestras catequesis mistagógicas hoy profundizaremos en la estructura del rito de entrada en la Eucaristía. Autor: Padre, Héctor Giovanny Sandoval Moreno. Comisión litúrgica, Arquidiócesis de Ibagué.   
La celebración empieza con una serie de elementos más o menos orgánicamente entrelazados que son el preludio, la apertura de la asamblea eucarística. La función de estos elementos es doble:

 1. Realizar pedagógicamente el paso de cada cristiano desde su situación en la calle a la nueva situación de asamblea reunida en torno a Cristo. Cada cristiano llega de fuera, con sus preocupaciones personales y con las preocupaciones del mundo. Entonces, mediante estos ritos de entrada, ha de poner estas preocupaciones en contacto con Jesucristo, en situación de plegaria, y ha de sentirse al mismo tiempo en comunión con los otros cristianos que forman con él la misma asamblea.

2. Crear el clima propio del tiempo litúrgico o de la fiesta que se celebra. La variedad de ritos iniciales ayuda a irse situando poco a poco en la celebración, ayuda a ir entrando de la calle al encuentro con Cristo, de la vida individual al encuentro comunitario.

Los ritos de entrada sirven para acoger a la asamblea y son la apertura de la celebración. Sus objetivos son los de ayudar a formar y sentirse como comunidad y preparar a los fieles a oír y celebrar dignamente la Eucaristía. "Los ritos que preceden a la Liturgia de la Palabra... tienen el carácter de exordio, introducción y preparación" (ORDENACIÓN DEL MISAL ROMANO N. 46).


Estos ritos iniciales son los siguientes:

a) Procesión y canto de entrada: Este primer momento de la celebración sirve para abrir festivamente la celebración, fomentar la unidad de los fieles y acompañar la procesión.

b) Veneración del altar: El altar es signo de Cristo, por eso al iniciar la celebración se venera con el beso ritual del sacerdote que preside y también con la utilización el incienso.
 
c) La señal de la Cruz: Evoca nuestra condición de bautizados  y nos recuerda que somos congregados en nombre de la Santísima Trinidad.

d) Saludo a la Asamblea: El saludo litúrgico nos recuerda que quien preside lo hace en nombre de Cristo y se establece aquí un diálogo de comunión entre el Presidente y la Asamblea: El Señor esté con ustedes.


e) Monición Inicial: Tiene por objeto introducir la celebración y lograr un ambiente celebrativo. Debe ser breve, sencilla y preparada. Puede pronunciarla el presidente o un laico.

f) Acto penitencial: Es un momento de reconocimiento de nuestros pecados y apertura a la misericordia de Dios. Este acto a su vez consta de varias partes:

- Monición, que dice el presidente
- Silencio breve
- Confesión general: yo confieso
- Oración conclusiva del presidente.

g) El Kyrie: "Señor, ten piedad". Tiene carácter doxológico, no es penitencial sino que tiene sentido de aclamación a Cristo y petición de misericordia.

h) El himno del Gloria: No fue compuesto para la Misa. Entró en la Eucaristía para la fiesta de Navidad extendiéndose después a los domingos. Es un himno trinitario de alabanza. Se le llama también doxología mayor o gran doxología.

i)
La oración Colecta: Es la primera de las oraciones presidenciales. Mediante esta oración se expresa la índole de la celebración, o sea, el carácter propio del día. Si es solemnidad, fiesta o memoria se suele citar en la misma el santo que celebramos. Se la llama así porque recoge las intenciones individuales en una sola oración que se convierte en la oración de la Iglesia.

En los próximos domingos nuestras catequesis mistagógicas profundizaran cada momento celebrativo del rito de entrada.