EDIFICAMOS NUESTRA VIDA CON LA PALABRA DE DIOS
Evangelio viernes 28 de julio 2023
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Dijo a sus discípulos: "Escuchen ahora la parábola del sembrador: Cuando uno oye la palabra del Reino y no la interioriza, viene el Maligno y le arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Ahí tienen lo que cayó a lo largo del camino. La semilla que cayó en terreno pedregoso, es aquel que oye la Palabra y en seguida la recibe con alegría.
La semilla que cayó entre cardos, es aquel que oye la Palabra, pero luego las preocupaciones de esta vida y los encantos de las riquezas ahogan esta palabra, y al final no produce fruto.
La semilla que
cayó en tierra buena, es aquel que oye la Palabra y la comprende. Este
ciertamente dará fruto y producirá cien, sesenta o treinta veces más". Mateo
13, 18-23.
La
Palabra de Dios debe producir una serie de efectos en cada persona. La Sagrada
Escritura nos enseña cuál debería la actitud ideal en Aquel que escucha y pone
en práctica la Palabra. No necesariamente todo el que escucha la Palabra la
lleva a feliz término. Razón suficiente para pensar en los modelos que se deben
evitar para que la Palabra cumpla su misión en el corazón de cada creyente.
¿Qué
debemos evitar? Hay personas distraídas
que no logran entender el Reino de Dios. San Pablo hace énfasis en aquellas
personas que no aceptan las enseñanzas espirituales, que no tienen el espíritu
de Dios, consideran una tontería el mensaje de Dios. (cfr. 1 Corintios 2,
14-16).
Existen personas que no perseveran en el proceso del conocimiento de la
Palabra de Dios. Algo así como cuando prima más la emotividad, pero no se llega
al final. El apóstol Santiago recomienda la perseverancia bajo las pruebas de
la vida, de esa manera la persona lograr recibir tantas bendiciones de Dios.
(cfr. Santiago 1, 12).
Hay
personas que no le abren espacio a la Palabra del Reino, porque sus
preocupaciones son más fuertes que la misma bondad que ofrece el Reino de
Dios. El Salvador del mundo recomienda vencer las preocupaciones de este mundo
con la siguiente propuesta: “¿Quién por mucho que se preocupe, puede añadir una
sola hora al curso de su vida?” (Mateo 6, 27).
El ideal que
desea Dios, es que todos los que creemos en su Palabra, nuestra respuesta sea
ponerle en práctica y así edificar nuestra vida sobre una base firma. (cfr.
Mateo 7, 21- 24-27). El Papa Benedicto XVI explica que la semilla
es la Palabra (cfr. Marcos 4, 14): quienes oyen la Palabra, la acogen y dan
fruto (cfr. Marcos 4, 20), forman parte del reino de Dios, es decir, viven bajo su señorío; están en el
mundo, pero ya no son del mundo; llevan dentro una semilla de eternidad, Este
es el poder de la Palabra de Cristo. (cfr. Ángelus, 15 de noviembre 2009).
SI DESEAS ESCUCHAR EL AUDIO DE ESTA REFLEXIÓN HAZ CLICK AQUÍ
https://youtu.be/nN6QBOhW7eU
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