Evangelio domingo 7 de abril 2024
Padre, Jairo Yate Ramírez.
Arquidiócesis de Ibagué
Dicho esto,
les mostró las manos y el costado. Los discípulos se alegraron de ver al Señor.
Jesús les dijo otra vez: “La paz con vosotros. Como el Padre me envió, también
yo os envío”. Dicho esto, sopló y les dijo: “Recibid el Espíritu Santo. A
quienes perdonéis los pecados, les quedan perdonados; a quienes se los
retengáis, les quedan retenidos”.
Tomás, uno
de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Los
otros discípulos le decían: “Hemos visto al Señor”. Pero él les contestó: “Si
no veo en sus manos la señal de los clavos y no meto mi dedo en el agujero de
los clavos y no meto mi mano en su costado, no creeré”. °°° Juan 20, 19-31.
Desde
el momento fatal de la incredulidad, se puede llegar a ser una persona creyente.
La incredulidad es un espacio de tiempo en la vida de una persona que puede
prolongarse por la terquedad de la misma persona. Puede superarse, por la
humildad y el deseo de la persona por encontrar la verdad, por querer superar
su propia debilidad. A lo largo de la historia de la salvación existen una
serie de momentos en que el pueblo de Dios no recibió los dones y gracias que
deberían recibir, por su obstinación, por su incredulidad, por su rebeldía,
porque cayeron en la idolatría.
Cuando
la incredulidad ocupa el primer lugar en el corazón y la conciencia de la
persona, su vida ya no tiene un horizonte valedero. El camino que le queda a esa persona es su
propio ego o vivir según las tentaciones de este mundo. Razón tuvo Dios al
advertir a todos los que desearan seguir sus consejos, buscar la felicidad,
tener criterios para la superación. Dijo el creador: “No tendrás otros dioses
delante de mí” (Éxodo 20, 3). Al pueblo de Dios se le ocurrió todo lo
contrario: “Adoraron un becerro de oro” (Éxodo 32).
Para
algunas personas, es complicado “creerle a Dios”. La pregunta sería: ¿se puede
superar? La respuesta es sí. Existen buenos ejemplos de santos, santas, que
superaron sus limitaciones y llegaron a la gloria de su propia perfección.
¿Cuál puede
ser el medio? La respuesta es: Dejándose
guiar por la Palabra de Dios, permitiendo que el Espíritu de Dios, resuelva las
dudas que hay en la persona. Según la Biblia el apóstol Santo Tomás ya
había tenido una experiencia de Dios. Tomás invita a sus compañeros a tener la
experiencia que el Maestro les contó: “Lázaro está muerto” (Juan 11, 12-16).
Tomás pregunta a su Maestro por el
camino a seguir. El Maestro le dice que Él es el camino. (Juan 14, 5-6). Tomar
recupera su fe, gracias a su Maestro que le dice: “No seas incrédulo, sino
creyente”. (Juan 20, 31).
EN EL AÑO DEL HIJO JESUCRISTO
Toda la riqueza de Cristo "es para todo hombre y constituye
el bien de cada uno". Cristo no vivió su vida para sí mismo, sino para
nosotros, desde su Encarnación "por nosotros los hombres y por nuestra
salvación" hasta su muerte "por nuestros pecados" (1 Corintios
15, 3) y en su Resurrección para nuestra justificación (Romanos 4, 25).
(Catecismo # 519)
SI DESEAS ESCUCHAR EL AUDIO DE ESTA REFLEXIÓN
HAZ CLICK AQUÍ