17 de febrero de 2024

LAS TENTACIONES MERECEN UNA BUENA RESPUESTA Evangelio domingo 18 de febrero 2024


LAS TENTACIONES MERECEN UNA BUENA RESPUESTA
       
Evangelio domingo 18 de febrero 2024
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“El Espíritu impulsó a Jesús a retirarse al desierto, donde permaneció cuarenta días y fue tentado por Satanás. Vivió allí entre animales salvajes, y los ángeles le servían. Después de que arrestaron a Juan Bautista, Jesús se fue a Galilea para predicar el Evangelio de Dios y decía: Se ha cumplido el tiempo y el Reino de Dios ya está cerca. Arrepiéntanse y crean en el Evangelio.” Marcos 1, 12-15.
 
            Jesús no sólo es el predicador del Reino sino quien lo realiza plenamente: su palabra es eficaz. El Hijo de Dios es más fuerte que satanás, fue enviado por el Padre celestial para darle fin al anti Reino, el sistema del mal, las tentaciones que ofrece el mundo a quienes desean sean servidores de Dios.
 
Las tentaciones nos limitan para crecer en el bien y en la verdad.  Según la Sagrada Escritura, el período del desierto fue el tiempo del noviazgo de Dios con su pueblo; pero también el tiempo de la rebelión y de las murmuraciones del pueblo contra Dios.  La solución era buscar el verdadero arrepentimiento de todo lo que había sucedido y comenzar a buscar la fuente de Dios. 
 
Los dos movimientos son: practicar los mandamientos prescritos por el Señor, (cfr. Deuteronomio 8, 1). Lo segundo; las pruebas de Dios buscan la superación de cada persona, (cfr. Deuteronomio 8, 2-7). 
            La conversión y la penitencia son los caminos portentosos que enseña Dios para combatir las tentaciones. Jesucristo no hizo caso omiso ante las tentaciones, al contrario, las enfrentó. Lo hizo con la seguridad de quien cree y sabe lo que está haciendo. Las tentaciones se enfrentan con una buena respuesta.
 
El Maestro enseña: “Esta gente pide una señal, no se le dará ninguna señal”. (Marcos 8, 11-12). “Apártate Satanás, piensas como los hombres y no como Dios”. (Marcos 8, 33). Ante la inminencia del dolor y la pasión, el Hijo de Dios ora diciendo: “Que no se haga mi voluntad, sino la tuya”. (Marcos 14, 32-36).
 
El Papa Francisco recomienda no confiar en el diablo, es el campeón de los mentirosos, es el padre de la mentira. Sus propuestas son siempre mentira. Es un derrotado, pero se mueve como vencedor. (cfr. Homilía, 8 de mayo, 2018).
 
EN EL AÑO DEL HIJO JESUCRISTO
¿Cómo nos imaginamos el corazón de Jesucristo, quien es el Verbo encarnado? Nuestra Iglesia Católica responde: Jesús, durante su vida, su agonía y su pasión nos ha conocido y amado a todos y a cada uno de nosotros y se ha entregado por cada uno de nosotros: "El Hijo de Dios me amó y se entregó a sí mismo por mí" (Gálatas 2, 20).
 
Nos ha amado a todos con un corazón humano. Por esta razón, el sagrado Corazón de Jesús, traspasado por nuestros pecados y para nuestra salvación (cfr. Juan 19, 34), "es considerado como el principal indicador y símbolo [...] de aquel amor con que el divino Redentor ama continuamente al eterno Padre y a todos los hombres" (cfr. Catecismo. # 478).
SI DESEAS ESCUCHAR EL AUDIO DE ESTA REFLEXIÓN HAZ CLICK AQUÍ 
https://youtu.be/vvBjGiMYqtA