DAMOS TESTIMONIO DE LO QUE HEMOS EXPERIMENTADO Evangelio Viernes 16 de Diciembre 2022

DAMOS TESTIMONIO DE LO QUE HEMOS EXPERIMENTADO                  
Evangelio Viernes 16 de Diciembre 2022
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Dijo Jesús a los judíos: «Vosotros enviasteis mensajeros a Juan, y él ha dado testimonio en favor de la verdad. No es que yo dependa del testimonio de un hombre; si digo esto es para que vosotros os salvéis. Juan era la lámpara que ardía y brillaba, y vosotros quisisteis gozar un instante de su luz. Pero el testimonio que yo tengo es mayor que el de Juan: las obras que el Padre me ha concedido llevar a cabo, esas obras que yo hago dan testimonio de mí: que el Padre me ha enviado». Juan 5, 33 – 36.
 
            El testimonio es válido y define prácticamente la misión. Patenta la obra que una persona realiza en nombre de Dios, en nombre de la Iglesia, en nombre de quien lo envió. Jesucristo tiene toda la razón en acreditar su testimonio. Indicarle a la humanidad que su testimonio es verdadero, que Él actúa en nombre de su Padre celestial. Un buen testimonio de alguien, en aquel donde la persona demuestra que es un “enviado” o sea, que dicha persona no decide las cosas a título personal. Lastima enormemente una misión cuando alguien presenta su parecer y no el contenido del querer de Dios.
 
            La Sagrada Escritura demuestra que el testimonio de Cristo es verdadero. Dice el libro sagrado: “Ustedes escudriñan las Escrituras, pensando que encontrarán en ellas la vida eterna, y justamente ellas dan testimonio de mí. Sin embargo ustedes no quieren venir a mí para tener vida.” (Juan 5, 39-40). La misión de anunciar la Palabra, de vivir la Palabra, de defender la Palabra, de sembrar la Palabra, tiene que ver necesariamente con el testimonio, la dedicación, el emprendimiento, la constancia, la decisión. 

El apóstol Juan es claro cuando afirma la relación que tiene lo que hemos visto y hemos oído y sobre eso exactamente se da testimonio y se anuncia la vida eterna. (cfr. Juan 1, 1-4). En todos los relatos que aparecen en el Evangelio, donde sucede una intervención del Maestro de Nazareth, la primera reacción es el testimonio. La persona que recibe la bondad de Dios sale a comunicarla, da testimonio de lo que ha vivido y experimentado.
 
            El Papa san Juan Pablo II, hablando de la obra esencial del Hijo de Dios, enseña que toda la vida de Jesucristo, su alimento consiste en hacer la voluntad del que lo envió (cfr. Juan 4, 34). porque no busca su voluntad, sino la voluntad del Padre que lo envió al mundo, su juicio es justo (cfr. Juan 5, 30). el Padre da testimonio de él (cfr. Juan 5, 37), y también las Escrituras (cfr. Juan 5, 39). Sobre todo las obras que realiza en nombre del Padre garantizan que fue enviado por él (cfr. Juan 5, 36; 10, 25. 37-38). 

Entre ellas, la más importante es la de dar su vida, como el Padre se lo ha ordenado: esta entrega es precisamente la razón por la que el Padre lo ama (cfr. Juan 10, 17-18).  (cfr. Audiencia 7 de abril, 1999).
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