16 de octubre de 2024

SIMPLEMENTE UNA INFAMIA CRIMINAL Padre Mario García Isaza


16 de octubre 2024.
SIMPLEMENTE, UNA INFAMIA CRIMINAL Autor: Padre Mario García Isaza c.m
Formador Seminario Mayor Arquidiócesis de Ibagué. magarisaz@hotmail.com     La Superintendencia de salud emitió, el pasado 20 de septiembre, una Circular Externa, la  2024150000000011-5, “por la cual se imparten instrucciones generales de inspección, vigilancia y control para la garantía del derecho a la salud de personas trans en Colombia”.
Se trata de un mamotreto de 23 páginas, cuyo contenido, cuyas determinaciones, impartidas con carácter de obligatoriedad, son profundamente inmorales, sencillamente aberrante y criminales. No es de extrañar, por supuesto, que sea así.
 
Al frente de esa entidad puso el presidente Petro desde febrero de 2023 al señor Jesús Leal, un activista homosexual y promotor de la ideología de género, de quien con razón afirma Jesús Magaña, presidente de “Unidos por la Vida”, que expide la mencionada circular “para promover la hormonización y el cambio de sexo de acuerdo a su ideología, a su propia forma de vivir”.

            Subyace al documento en mención, como sucede en tantos otros de nuestras Cortes y otros organismos oficiales, el fatal desconocimiento o la negación de la existencia de una Ley Natural, que, por serlo, es anterior y está por encima de toda ley positiva; desconocimiento o negación que llevan, inevitablemente, a aberraciones como son el presentar como un derecho el asesinato de los nonatos, o la eliminación por eutanasia de quien sufre o es considerado inútil, o la asimilación con el matrimonio de uniones anormales y vitandas, o la corrupción de los niños y adolescentes mediante la imposición de la ideología de género
 
            La malhadada circular trae a cuento más de 25 resoluciones de nuestra Corte Constitucional, siempre tan deslumbrada en materia de ética y tan empeñada en zapar los cimientos cristianos de la sociedad colombiana, que supuestamente dan pie a las escabrosas normas de la Supersalud. Me refiero especialmente al apartado H de la Circular, dedicado a “infancias y adolescencias trans en proceso de desarrollo” (?) 

y que pretende “asegurarle a esta población un desarrollo saludable y apoyo en la afirmación y/o expresión de género” … Es un intento siniestro, sellado con veladas y tortuosas amenazas de sanción, de promover, como algo positivo, normal y hasta plausible, la perplejidad afectivo-sexual y el cambio de sexo; es decir, violentar la naturaleza, otorgarle el sello de normal a lo que no lo es, torcerle el cuello a lo establecido por el Creador del hombre y de todo cuanto existe.
 
“A imagen de Dios los creó. Hombre y mujer los creó”, reza el Libro del Génesis.
Hace la Circular de la Superintendencia, afirmaciones contraevidentes, que no se sostienen ante las leyes de la sicología, ni siquiera ante el más elemental sentido común. Resulta casi risible afirmar, como lo hace apoyándose en la Sentencia T-447 de la Corte, que “a los cinco años los niños desarrollan su identidad de género”. ¿Se habrán asomado los insensatos togados de la Corte y el despistado o malintencionado señor Leal a un manual de sicología evolutiva?
 
 No parece. Y basándose en semejante dislate, establece la Circular que los niños, óigase bien, tienen derecho a pedir, y los médicos obligación de atenderlos, que se les practique una intervención quirúrgica o se les suministre una medicación para cambiar de sexo, y que no solamente no es necesario, sino que constituye una intromisión indebida, pedir o esperar la autorización o aprobación de los padres.
 
            Y se despacha con afirmaciones insensatas, como ésta: “la protección o reconocimiento de esa identidad (sexual) por medio de procedimientos médicos no están sujetos a cumplir determinada edad, ni existe ninguna evidencia científica que así lo sustente”; para establecer consecuentemente que “ en los casos de intersexualidad (?) el consentimiento sustituto para la definición de sexo es  válido…solamente cuando se emite antes de ese umbral” (los cinco años) Y más patochadas :  “los menores de edad son los únicos que pueden decidir sobre su vida y libertad, las cuales incluyen el sexo como elemento relevante de su identidad”…¡Por Dios! ¿se percatarán estos imbéciles de la barbaridad en que incurren? Porque, según eso, los adultos no gozan de esa autonomía y libertad…
 
            Habría campo para muchas otras consideraciones sobre esta Circular de la Superintendencia, que es una verdadera infamia. Habría, por ejemplo, que hacer énfasis en que con esas determinaciones se violan y pisotean de forma imperdonable el derecho y la autoridad de los padres de familia. Ya, en virtud de decisiones como las de esta Circular, se ha llegado al colmo de que una niña de nueve años que llega con sus padres a un consultorio médico, sea recibida por el profesional de la salud con interrogantes como éste: ¿cómo te percibes: niña o niño? Y, atérrense ustedes: el presidente Petro ha tratado de delincuentes a unos padres de familia que han protestado contra este adefesio moral de la superintendencia, y ha amenazado con denunciarlos penalmente.
 
Ante esta actuación abusiva y grotesca de la Superintendencia, deberían darse una protesta y rechazo multitudinarios de la sociedad colombiana. El doctor José Alvear Sanín, en comunicación que agradezco, me hace esta observación:  hasta ahora, la única reacción ha sido la de unos padres de familia, a quienes Petro acusa del delito de odio… La venerable Jerarquía no ha salido en defensa de nuestros niños… Y creo que le asiste toda la razón para esta queja respetuosa.

            En ACI Prensa, don Eduardo Berdejo invita a una marcha de protesta para el próximo 19 de octubre, con el objetivo de pedir la revocatoria inmediata de la nefasta circular, y la destitución del señor Leal. No es de esperarse que quien por desgracia nos desgobierna escuche tales solicitudes, por supuesto, ya que es él el primero, con su propia conducta y con sus proyectos, en el empeño de desterrar todo principio moral en la vida de los colombianos; sin embargo, vale la pena apoyar esta convocatoria, y dejar oír nuestra voz de rechazo ante estos atentados protervos contra la inocencia de nuestros niños.