7 de noviembre de 2025

ELEGIMOS SEGÚN LA SABIDURÍA DE DIOS Evangelio sábado 8 de noviembre 2025


APRENDE A ELEGIR SEGÚN LA SABIDURÍA DE DIOS
Te quedas con Dios o con el dinero
Evangelio sábado 8 de noviembre 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Jesús decía a sus discípulos: “Gánense amigos con el dinero de la injusticia, para que el día en que éste les falte, ellos los recibirán en las moradas eternas.El que es fiel en lo poco también es fiel en lo mucho, y el que es deshonesto en lo poco también es deshonesto en lo mucho. Si ustedes no son fieles en el uso del dinero injusto, ¿quién les confiará el verdadero bien? Y si no son fieles con lo ajeno, ¿quién les confiará lo que les pertenece a ustedes?
 
Ningún servidor puede servir a dos señores, porque aborrecerá a uno y amará al otro, o bien se interesará por el primero y menospreciará al segundo. No se puede servir a Dios y al Dinero”.
Los fariseos, que eran amigos del dinero, escuchaban todo esto y se burlaban de Jesús. Él les dijo: “Ustedes aparentan rectitud ante los hombres, pero Dios conoce sus corazones. Porque lo que es estimable a los ojos de los hombres resulta despreciable para Dios”.
Lucas 16, 9-15
 
Dios nos enseña a tener un uso correcto, responsable de lo que somos y de nuestros bienes. Existe una marcada diferencia entre la sabiduría que viene de Dios y la sabiduría que ostentan tener los seres humanos. La sabiduría que viene a través del Espíritu de Dios nos permite distinguir entre el bien y el mal, entre lo correcto y lo no deseable, entre el éxito y el fracaso total. La persona que vive más cercana a Dios y a su Palabra goza de su sabiduría y se convierte en modelo para los demás.
 
            El apóstol Santiago nos recomienda acogernos a la sabiduría que viene de Dios: “Cuando se trata de soportar todo tipo de pruebas, si queremos ser perfectos, completos, sin que nos falte nada. Si alguno de ustedes ve que le falta sabiduría, que se la pida a Dios, pues da con agrado a todos sin hacerse rogar. Él se la dará.” (Santiago 1, 4-5).
 
Los comportamientos de cada persona permiten saber qué clase de sabiduría los está guiando. Dice el apóstol: ¿Así que eres sabio y entendido? Si tu sabiduría es modesta, veremos sus frutos en tu conducta noble. Pero si te vuelve amargo, celoso, peleador, no te fíes de ella, que eso sería mentira. Esa clase de sabiduría no viene de arriba sino de la tierra, de tu propio genio y del demonio. Y donde hay envidia y ambición habrá también inestabilidad y muchas cosas malas “. (Santiago 3, 13-16).
 
            Quien goza de la sabiduría divina sabe perfectamente qué significa: “Hacer uso del dinero injusto”. “Ser fiel en lo pequeño y en lo grande” “No se le puede servir a Dios y al dinero simultáneamente”.  
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https://youtu.be/XC2xpZmIP5s