HAY QUE VOLVER POR LOS CAMINOS DE DIOS
EVANGELIO DOMINGO 23 DE ENERO 2022
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué “Fue a Nazaret, donde se había criado; entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados y se levantó para proclamar la lectura. Le presentaron el libro del profeta Isaías, y abriéndolo, encontró el pasaje donde dice: «El espíritu del Señor está sobre mí, porque el Señor me ungió. Él me envió a llevar una buena noticia a los pobres, a anunciar la liberación a los cautivos y dar vista a los ciegos.” ° °° (Lucas 1, 1-4; 4, 14-21
El programa de Cristo no es una utopía. Es un programa de vida, una propuesta de salvación, una organización social, un sistema de convivencia útil para toda lengua y cultura, eso implica decir que es universal. Es ese tiempo de pensamiento sistemático, donde se comprende la realidad en toda su complejidad. Donde están las miradas y los corazones de muchos dirigentes, organizaciones, la misma Iglesia, el pueblo creyente.
El Nazareno plantea un mundo nuevo, una vida digna, un respeto por los derechos, un cumplimiento de los deberes, unos principios morales - éticos que se cumplan en todos los países del planeta; un cambio social de cara a Dios y al espíritu de su santa Palabra. Una sinodalidad: un espacio donde las personas son escuchadas, son tenidas en cuenta, no hay lugar para el descarte de los seres humanos, ni mucho menos pensar en racismo, xenofobia, homofobia. El salvador del mundo está interesado en “dar libertad a los oprimidos.”
El eco de la voz de Dios, es una Buena Nueva que nos permite entender que sólo en el conocimiento de la verdad, la vivencia de esa verdad y con base en la verdad, el hombre podrá encontrar el camino de la auténtica libertad (cfr. Juan 8,32). La libertad es la propia vida del hombre, es la vida de su vida, es el encuentro con su propia realidad; así la siente y la experimenta el hombre, es algo que lleva dentro es una esperanza que se transporta a lo largo de los siglos.
El Papa Francisco comenta sobre tres gracias que adquirimos al
decidirnos por Jesús de Nazareth: La gracia de seguirlo a él, es incondicional
y llena de afecto. La gracia del asombro: Todos se maravillan de sus milagros,
de su personalidad. La gracia del discernimiento: Llegaron a la conclusión de
que el Hijo de Dios enseña con autoridad. (Homilía, 18 de abril, 2019). Cuida tu salud: La alternativa es que todos
volvamos por los caminos de Dios.