18 de enero de 2022

JESUCRISTO SIEMPRE RESTAURA LA VIDA. Evangelio Martes 18 de enero 2022

JESUCRISTO SIEMPRE RESTAURA LA VIDA  
Evangelio martes 18 de enero 2022.
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Caminando Él a través de las mieses en día de sábado, sus discípulos, mientras iban, comenzaron a arrancar espigas. Los fariseos le dijeron: Mira, ¿Cómo hacen en sábado lo que no está permitido? Y les dijo: ¿Nunca habéis leído lo que hizo David cuando tuvo necesidad y sintió hambre él y los suyos? ¿Cómo entró en la casa de Dios, bajo el pontificado de Abiatar, y comió de los panes de la proposición, que no es lícito comer sino a los sacerdotes, y los dio asimismo y a los suyos? Y añadió: El sábado ha sido hecho para el hombre, y no el hombre para el sábado. Y dueño del sábado es el Hijo del hombre.” Marcos 2, 23-28

            Jesucristo restaura la vida ante el impedimento de la ley. La Buena Nueva que proclama el Salvador del mundo es novedosa y tiene autoridad. Cuando llega a anunciar el Reino de su Padre celestial, encuentra: un día sagrado, el sábado. Un lugar sagrado, la sinagoga. Una comunidad sagrada, la asamblea de Israel congregada. Dice el hermeneuta bíblico: ha llegado aquel que supera a los profetas y a todos los maestros de Israel. El Hijo del hombre es superior a las leyes sagradas, sobre todo la ley del sábado. (cfr. Éxodo 20, 1-17).

            San Juan Pablo II afirmaba: "El error y el mal deben ser condenados y combatidos constantemente; pero el hombre que cae o se equivoca debe ser comprendido y amado. °°° Las recriminaciones, las críticas amargas y polémicas, los lamentos sirven poco: nosotros debemos amar nuestro tiempo y ayudar al hombre de nuestro tiempo. (Discurso a la acción católica italiana, 30 diciembre 1978). Jesucristo restaura la vida para el servicio. Entra a la casa de Pedro y cura a la suegra de él. (cfr. Marcos 1, 29-39). El Maestro, acoge a los marginados, cura a los enfermos y poseídos. Eso lo hace en el día sábado.

            El Papa Francisco piensa en una Iglesia que debe enseñar y defender los valores fundamentales. sin olvidar que "el sábado se hizo para el hombre y no el hombre para el sábado"; y que Jesús también dijo: "No necesitan médico los sanos, sino los enfermos. No he venido a llamar justos, sino pecadores”. Una Iglesia que educa al amor auténtico, capaz de alejar de la soledad, sin olvidar su misión de buen samaritano de la humanidad herida. (cfr. Homilía, 4 de octubre, 2015).


            El Catecismo de nuestra Iglesia Católica, recuerda que el Hijo del Hombre es el Señor del sábado: El Evangelio relata numerosos incidentes en que Jesús fue acusado de quebrantar la ley del sábado. Pero Jesús nunca falta a la santidad de este día (cfr. Marcos 1, 21; Juan 9, 16), sino que con autoridad da la interpretación auténtica de esta ley: “El sábado ha sido instituido para el hombre y no el hombre para el sábado” (Marcos 2, 27). Con compasión, Cristo proclama que “es lícito en sábado hacer el bien en vez del mal, salvar una vida en vez de destruirla” (Marcos 3, 4). El sábado es el día del Señor de las misericordias y del honor de Dios (cfr. Mateo 12, 5; Juan 7, 23). “El Hijo del hombre es Señor del sábado” (Marcos 2, 28). (cfr. Numeral Catecismo 2173).