DIOS ESTÁ INTERESADO EN SANAR Y SALVAR LAS PERSONAS. Evaengelio Jueves 20 de Enero 2022

DIOS ESTÁ INTERESADO EN SANAR Y SALVAR A LAS PERSONAS

Evangelio jueves 20 de enero 2022

Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué.

“Jesús se retiró con sus discípulos hacia el mar, y le siguió una gran muchedumbre de Galilea. También de Judea, de Jerusalén, de Idumea, del otro lado del Jordán, de los alrededores de Tiro y Sidón, una gran muchedumbre, al oír lo que hacía, acudió a él. Entonces, a causa de la multitud, dijo a sus discípulos que le prepararan una pequeña barca, para que no le aplastaran. Pues curó a muchos, de suerte que cuantos padecían dolencias se le echaban encima para tocarle. Y los espíritus inmundos, al verle, se arrojaban a sus pies y gritaban: «Tú eres el Hijo de Dios». Pero él les mandaba enérgicamente que no le descubrieran.” (Marcos 3, 7-12).

            Desde los inicios de la misión apostólica, el Maestro de Nazareth piensa en el dolor, el sufrimiento, la enfermedad y los males que aquejan al ser humano. Forma un grupo de discípulos, los envía de dos en dos, les da poderes para que atiendan las necesidades de las personas. Para que puedan cumplir perfectamente esa misión, les recomienda encarecidamente, no apegarse a los bienes de este mundo, no darle oportunidad a la tentación se la soberbia. Les insistía: Curen a los enfermos que haya y díganles: 'Ya llega Dios a reinar sobre vosotros'.» (cfr. Lucas 10, 1-12. 17-20).

El Papa emérito Benedicto XVI enseña que: el Maestro anuncia la Palabra y obra curaciones de enfermos, signo por excelencia de la cercanía del reino de Dios. La Iglesia, a la que se ha confiado la tarea de prolongar en el espacio y en el tiempo la misión de Cristo, no puede desatender estas dos obras esenciales: evangelización y cuidado de los enfermos en el cuerpo y en el espíritu.

Dios quiere curar a todo el hombre y en el Evangelio la curación del cuerpo es signo de la sanación más profunda que es la remisión de los pecados.  (cfr. Homilía, 11 de febrero, 2010). Afirma el libro sagrado: ¿En dónde está la fuerza de la fe?: Los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son limpiados, los sordos oyen, los muertos son resucitados, y a los pobres es anunciado el evangelio” (Lucas 7, 22)

            El Papa Francisco enseña que la comunidad siempre encuentra en Dios una esperanza, por su forma de hablar y de ser: “El pueblo siente esto y ve que en Jesús se cumplen las promesas, que en Jesús hay una esperanza. El pueblo estaba un poco aburrido de la forma de enseñar la fe, de los doctores de la ley de aquella época, que cargaban sobre la espalda muchos mandamientos, muchos preceptos, pero no llegaban al corazón de la gente.” (cfr. Homilía, 22 de enero 2015).