26 de noviembre 2023 La verdadera realeza consiste en la misericordia. Ángelus Regina Coeli Papa Francisco. Hoy, es el último domingo del año litúrgico y solemnidad de Nuestro Señor Jesucristo Rey del Universo. El Papa Francisco en su alocución previa al rezo mariano del Ángelus retomó el Evangelio del día, que habla del juicio final (cf. Mateo 25,31-46) y nos dice, dijo Francisco, que será sobre la caridad. Patricia Ynestroza-Ciudad del Vaticano
El Papa
explica que la escena que narra el Evangelio y que se nos presenta es la de una
sala real, en la que Jesús, "el Hijo del hombre", está sentado en un
trono. Todos los pueblos están reunidos a sus pies y entre ellos están
"los bienaventurados" (v. 34), los amigos del Rey. Pero, ¿Quiénes son? nos pregunta el Santo Padre ¿Qué tienen de especial estos amigos a los
ojos de su Señor?
El
Pontífice nos recuerda que "según los criterios del mundo, los amigos del
rey deberían ser aquellos que le han dado riqueza y poder, que le han ayudado a
conquistar territorios, a ganar batallas, a engrandecerse entre otros
gobernantes, tal vez a aparecer como estrella en las primeras páginas de los
periódicos o en las redes sociales, y a ellos les debería decir: "Gracias,
porque me han hecho rico y famoso, envidiado y temido". Esto según
los criterios del mundo"
La Corte de nuestro Rey, el Hijo del Hombre
En cambio,
afirma Francisco, los criterios de Jesús, sus amigos son aquellos que han
servido a los más débiles, porque "el
Hijo del hombre es un Rey completamente distinto, que llama
"hermanos" a los pobres, que se identifica con los hambrientos,
los sedientos, los forasteros, los enfermos, los encarcelados, y dice:
"Cada vez que lo hicieron con el más pequeño de mis hermanos, lo hicieron
conmigo" (v. 40)".
Es un Rey sensible al problema del hambre, de
la necesidad de un hogar, de la enfermedad y del aprisionamiento (cf. vv. 35-36): todas realidades
desgraciadamente siempre muy actuales, agregó el Pontífice, hoy día nuestras
calles siguen "abarrotadas" de personas que padecen hambre, sin
hogar, vestidas como pueden. Y cada uno
de nosotros sabe lo que significa la enfermedad y la cárcel. Estar enfermo y
pagar las consecuencias en prisión por errores cometidos.
Bienaventurado quien responde al necesitado con
amor
El Santo
Padre recuerda que el Evangelio dice que, si uno responde a estas necesidades
con amor, con servicio, es “bienaventurado". Si como cristianos, no nos
apartamos del necesitado, le damos de comer, de beber, vistiendo, acogiendo,
visitando, en una palabra, dijo el Papa, estando cerca de los necesitados. Y
esto porque Jesús, nuestro Rey, que se llama a sí mismo Hijo del Hombre, agregó
el Santo Padre, tiene sus hermanas y hermanos predilectos en las mujeres y
hombres más frágiles.
"Su
'sala real' está instalada donde hay quienes sufren y necesitan ayuda. Esta es
la "corte" de nuestro Rey. Y el estilo con el que sus amigos, los que
tienen a Jesús por Señor, están llamados a distinguirse es su propio estilo:
compasión, misericordia, ternura. Estas ennoblecen el corazón y descienden como
aceite sobre las heridas de cuantos están heridos por la vida".
De allí la
invitación de Francisco a cada uno a preguntarnos: ¿creemos que la verdadera realeza consiste en la misericordia? ¿Creemos
en el poder del amor? ¿Creemos que la caridad es la manifestación más noble del
hombre y una exigencia indispensable para el cristiano? Y, por último, una
pregunta particular: ¿soy yo amigo del Rey, es decir, me siento personalmente
implicado en las necesidades de las personas que sufren y que encuentro en mi
camino? Y concluye pidiendo a María, Reina del Cielo y de la Tierra, que nos
ayude a amar a Jesús, nuestro Rey, en sus hermanos más pequeños. Fuente: Vatican
News. Leyó este mensaje del Papa Monseñor Paolo Braida, de la oficina que se
encarga de los documentos papales.