ESTAMOS LLAMADOS A PRODUCIR Y A SERVIR Evangelio miércoles 22 de noviembre 2023

ESTAMOS LLAMADOS A PRODUCIR Y A SERVIR         

Evangelio miércoles 22 de noviembre 2023

Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué

“Dijo Jesús una parábola, pues estaba Él cerca de Jerusalén, y creían ellos que el Reino de Dios aparecería de un momento a otro. Dijo pues: Un hombre noble marchó a un país lejano, para recibir la investidura real y volverse. Habiendo llamado a diez siervos suyos, les dio diez minas y les dijo: "Negociad hasta que vuelva."
 
Pero sus ciudadanos le odiaban y enviaron detrás de él una embajada que dijese: "No queremos que ése reine sobre nosotros." Y sucedió que, cuando regresó, después de recibir la investidura real, mandó llamar a aquellos siervos suyos, a los que había dado el dinero, para saber lo que había ganado cada uno. Se presentó el primero y dijo: "Señor, tu mina ha producido diez minas." Le respondió: "¡Muy bien, siervo bueno! ; ya que has sido fiel en lo mínimo, toma el gobierno de diez ciudades." °°° Lucas 19, 11-28.
 
            Mientras llega a su plenitud el Reino de Dios, el regreso del Salvador del mundo, la humanidad tiene una tarea encomendada de producir. Todo creyente por ley divina recibe dones, gracias, inteligencia, sabiduría, talentos, destrezas, habilidades. Dice el libro de la creación: Dios creó al hombre y a la mujer, a imagen y semejanza, les dio el poder sobre la naturaleza, sobre las aves del cielo, sobre las criaturas” (cfr. Génesis 1, 27).
 
Razón suficiente para que ninguna persona se atreva a decir que no tiene talentos, que no es nadie, que no tiene cualidades etc. Quien piense o actúe en esa tonalidad está desconociendo la parábola de los talentos (En el Evangelio de Lucas Mientras regresa Jesucristo debemos fructificar los talentos) y la parábola de las minas (En el Evangelio de Mateo debemos rendir cuentas de los dones que Dios nos regaló, en su parusía).
 
 El llamado del Hijo de Dios es: “Negocien hasta que yo vuelva”. En otras palabras, cada persona debe reconocer sus talentos, aumentar sus talentos, colocar sus talentos al servicio de los demás, no cometer el error gravísimo de esconder sus talentos o negar sus talentos.
 
            Para poder cumplir la tarea encomendada por el creador, la clave es poner los talentos y cualidades nuestras al servicio de los demás. Evitar todo extremo. El primer extremo, la autosuficiencia. El segundo extremo, creer que no se es nadie. El punto del equilibrio es “Negocien hasta que yo vuelva” El servicio a los demás. “Somos siervos de Dios, hacemos lo que deberíamos hacer” (cfr. Lucas 17, 7-10).
 
Seamos humildes: La sabiduría de Dios se impone ante la inteligencia humana. (cfr. Lucas 14, 11). Seamos siempre agradecidos con Dios, todo es gratitud, todo es Gracia de Dios, nada es autosuficiencia nuestra. No olvidar que todos los beneficios nos vienen de Dios (cfr. Salmo 103).
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https://youtu.be/IY9SbQuijng