15 de mayo de 2024

DIOS QUIERE QUE VIVAMOS EN UNIDAD Evangelio jueves 16 de mayo 2024


DIOS QUIERE QUE VIVAMOS EN UNIDAD                         
Evangelio jueves 16 de mayo 2024
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Jesús levantó los ojos al cielo, y oró diciendo: Padre santo, no ruego solamente por ellos, sino también por los que, gracias a su palabra, creerán en mí. Que todos sean uno: como Tú, Padre, estás en mí y Yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que Tú me enviaste.
             Yo les he dado la gloria que Tú me diste, para que sean uno, como nosotros somos uno -Yo en ellos y Tú en mí- para que sean perfectamente uno y el mundo conozca que Tú me has enviado, y que los has amado a ellos como me amaste a mí. Padre, quiero que los que Tú me diste estén conmigo donde Yo esté, para que contemplen la gloria que me has dado, porque ya me amabas antes de la creación del mundo.” Juan 17, 20-26.
 
            ¿Cuál es la relación que desea el Hijo de Dios, que cada uno de nosotros guardemos con él?  La respuesta se puede convertir en tres deseos:  El éxito de nuestra misión va a estar si logramos vivir en unidad con Cristo Jesús. Nuestra misión va en comunión de amor con la persona de Cristo Jesús; él quiere que estemos con él hasta la eternidad. El Nazareno quiere que seamos el resplandor del amor ante toda la creación. Tres deseos del Hijo de Dios, tres compromisos de nosotros como bautizados, como consagrados, como misioneros.
 
            La Sagrada Escritura nos permite conocer los medios para vivir en unidad con Dios y con las demás personas. Estaremos en unidad con Dios cuando logremos que su Palabra sea el reflejo de nuestra manera de ser, nuestra personalidad, nuestra espiritualidad. Viviremos en unidad con los demás, cuando revisemos las siguientes consignas: La primera es el amor. Es el mandato universal para entenderse con Dios y con los demás que nos rodean. “No hay mayor amor, que el de dar la vida por los demás”. (Juan 15, 13).
 
            La segunda es crear la buena costumbre de ver lo bueno en los demás y no siempre lo malo que pueda tener esa persona. El apóstol san Pablo recomienda: “Sean comprensivos con el que no tiene segura su fe, y dejen las discusiones que terminan en división.” (Romanos 14, 1).
 
La tercera posibilidad es aprender a ubicarnos en el lugar de los demás, para no lastimar su dignidad ni su conciencia.  Antes de hablar o criticar, piense en los demás. San Pablo advierte: “Dejemos, pues, de juzgarnos los unos a los otros. Examinémonos, más bien, no sea que pongamos delante de nuestro hermano algo que lo haga tropezar”. (Romanos 14, 13).
SI DESEAS ESCUCHAR EL AUDIO DE ESTA REFLEXIÓN HAZ CLICK AQUÍ