Evangelio jueves 2 de mayo 2024
Padre, Jairo Yate Ramírez.
Arquidiócesis de Ibagué
Si cumplen mis mandamientos,
permanecerán en mi amor, como Yo cumplí los mandamientos de mi Padre y
permanezco en su amor. Les he dicho esto para que mi gozo sea el de ustedes, y
ese gozo sea perfecto.” Juan 15, 9-11.
Amar
es el principio y el fundamento del ser de cada persona que cree en Dios y
desea cumplir con su santa voluntad. Es cierto que existen muchas maneras
de amar. Una buena cantidad de personas ya no creen en el amor. Otras personas
confunden el amor con la pasión desordenada. Cuando el amor no va en
consonancia con la razón, una persona le hace mayor mal otra que el mismo
bien.
El Hijo de
Dios enseña a la humanidad dónde está el secreto para permanecer en el amor y
vivir según el amor. La respuesta es aquella persona que “Cumple con los
mandamientos”. La nobleza de la ley y
los profetas está en el amor. Toda persona que pretenda definir el amor,
llegará a la misma conclusión: “Amar es hacer siempre el bien”.
Jesús
reveló ese amor de Dios en sus encuentros con las personas. Lo reveló con
sentimientos de amistad, de ternura, como, por ejemplo, en su relación con
la familia de Marta en Betania: "Jesús amaba a Marta a su hermana y a
Lázaro". Llora delante de la tumba de Lázaro (Juan 11, 5,33-36). Jesús
afronta su misión como una manifestación de amor: "después de haber amado
a los suyos…los amó hasta el fin" (Juan 13,1).
En ese amor Jesús manifiesta su
profunda identidad con el Padre: "Como el Padre me amó, yo también os he
amado" (Juan 15.9). Y Él nos dice: "Amaos los unos a los otros como
yo os he amado" (Juan 15.12). Juan define así el amor: "Por esto
hemos conocido el amor: Él ha dado su vida por nosotros; por tanto, también
nosotros debemos dar la vida por los hermanos". (1 Juan 2,6). Quien vive
el amor y lo manifiesta en sus palabras y en su conducta se convierte en
Discípulo Amado.
El
Papa Francisco elocuentemente afirma: El amor. es «un amor que viene del
Padre». Y la «relación de amor entre Él y el Padre» llega a ser una «relación
de amor entre Él y nosotros». Así, «nos pide permanecer en ese amor que
viene del Padre». Y ¿cómo se permanece en el amor?
«Si
guardáis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, lo mismo que yo he
guardado los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor». «cuando no
permanecemos en el amor son los mandamientos que vienen, solos, por el amor». Y
«el amor nos lleva a cumplir los mandamientos. (cfr. Homilía, 22 de mayo 2014).
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