LA IDENTIDAD DEL NAZARENO ABRE FRONTERAS
Evangelio sábado 16 de marzo 2024
Padre, Jairo Yate Ramírez.
Arquidiócesis de Ibagué
“Algunos de
la multitud, que habían oído a Jesús, opinaban: “Éste es verdaderamente el
Profeta”. Otros decían: “Éste es el Mesías”. Pero otros preguntaban: “¿Acaso el
Mesías vendrá de Galilea? ¿No dice la Escritura que el Mesías vendrá del linaje
de David y de Belén, el pueblo de donde era David?” Y por causa de Él, se
produjo una división entre la gente. Algunos querían detenerlo, pero nadie puso
las manos sobre Él.
Los guardias fueron a ver a los
sumos sacerdotes y a los fariseos, y éstos les preguntaron: “¿Por qué no lo
trajeron?” Ellos respondieron: “Nadie habló jamás como este hombre”. Los
fariseos respondieron: “¿También ustedes se dejaron engañar? ¿Acaso alguno de
los jefes o de los fariseos ha creído en Él? En cambio, esa gente que no conoce
la Ley está maldita”. °°° Juan 7, 40-53
Cuando
alguien es muy bueno, siempre encontrará divergencias en la sociedad. El
origen y la identidad de Jesús de Nazareth, ha sido tema de discusión. Cuando
una persona logra conocer y entender al Salvador del mundo, llega a la
conclusión que la Palabra de Dios pone en dificultades la soberbia humana, el
ansia de poder, la envidia de la sociedad.
Si el mundo
judío en su momento manejaba varias hipótesis sobre la procedencia del
Nazareno, eso también es un signo para decir que la manera de ser de Jesús se
convirtió en un reto para los diferentes espacios sociales.
El
ser de Jesucristo, es un reto para todos aquellos que pretendan ser sus
discípulos, aquellos que lo representen a Él ante una sociedad donde hay
multiplicidad de pensamientos. Quien asuma ese reto con sabiduría divina, con
fortaleza, con prudencia logrará permanecer en la Palabra de Dios y ser
verdaderamente su discípulo. (Juan 8, 31).
El apóstol san Pablo da un consejo de oro a Timoteo para que se distinga como
un excelente discípulo del Maestro: “Predica la Palabra a tiempo y destiempo.
Reprende, corrige, exhorta con paciencia. Procura siempre una buena preparación
doctrinal. Hay que estar atentos al momento en que los hombres no soportan la
sana doctrina”. (2 Timoteo 4, 1-5).
El Papa Benedicto XVI explica la
procedencia de Jesús diciendo: En Jesús
se cumple la promesa del nuevo profeta. En Él se hace plenamente realidad
lo que en Moisés era solo imperfecto. Él vive en la más íntima realidad con el
Padre. En esto se fundamenta las Palabras, la obra, los sufrimientos de Jesús
de Nazareth. (cfr. Libro Jesús de Nazareth).
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