22 de julio de 2025

ESCUCHAR Y OBEDECER NOS PIDE DIOS Evangelio miércoles 23 de julio 2025


ESCUCHAR Y OBEDECER NOS LLEVAN POR LOS CAMINOS DE DIOS
    
Evangelio miércoles 23 de julio 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Jesús salió de la casa y se sentó a orillas del mar. Una gran multitud se reunió junto a Él, de manera que debió subir a una barca y sentarse en ella, mientras la multitud permanecía en la costa. Entonces Él les habló extensamente por medio de parábolas. Les decía: “El sembrador salió a sembrar. Al esparcir semillas, algunas cayeron al borde del camino y los pájaros las comieron.
 
Otras cayeron en terreno pedregoso, donde no había mucha tierra, y brotaron en seguida, porque la tierra era poco profunda; pero cuando salió el sol, se quemaron y, por falta de raíz, se secaron. Otras cayeron entre espinas, y éstas, al crecer, las ahogaron. Otras cayeron en tierra buena y dieron fruto: unas cien, otras sesenta, otras treinta.
¡El que tenga oídos, que oiga!”. Mateo 13, 1-9
 
            Para poder comprender, anunciar y vivir la Palabra que viene de Dios se hace obligatorio seguir el consejo del Maestro: “El que tenga oídos que escuche”. En otras palabras, para convertirse en un mensajero de la Palabra es importantísimo estar atentos, ser receptivos, solo escuchar y dejar que la Palabra logre ubicarse en el corazón de cada uno de nosotros. Jesucristo presupone que todos aquellos que tienen oídos están en la capacidad de escuchar.
 
Eso implica decir que la Palabra divina es de carácter universal, se acomoda a todo tipo de idioma, cultura y nación. No debería existir diferencia en la interpretación de la Palabra, salvo que sea una necedad del ser humano hacerlo sin la ayuda del Espíritu de Dios.
 
            Escuchar y obedecer se complementan perfectamente. Desde un primer momento en la historia de la salvación Dios se dio cuenta que el ser humano es bastante necio, escucha pero no obedece, escucha y decide lo contrario, escucha e interpreta equivocado, escucha pero no lo cumple sino que cree que lo deben hacer los demás. La primera recomendación de Dios es que quien escuche y obedezca sus mandatos encontrará la salvación. (cfr. Mateo 19, 17).
 
La segunda recomendación es que utilicemos correctamente los sentidos que él nos regaló: Dice el salmista: “Tienen ojos y no ven, tienen oídos y no quieren escuchar” (Salmo 115, 5-7). (Jeremías 5, 21). La tercera recomendación es que nos convirtamos en el espacio agradable a Dios y útil para la misión.
 
El apóstol propone: “Sigan el amor a ejemplo de Cristo. Pórtense como hijos de la luz, con bondad, con justicia y en la verdad.” (Efesios 5, 1-10). El Papa Francisco nos recuerda que: La parábola del sembrador es un poco la “madre” de todas las parábolas, porque habla de la escucha de la Palabra. 

Nos recuerda que la Palabra de Dios es una semilla que en sí misma es fecunda y eficaz; y Dios la esparce por todos lados con generosidad, sin importar el desperdicio.” (Ángelus, 12 de julio, 2020).
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https://youtu.be/4sbKF64PDXM