6 de septiembre 2025 “Esperar es Excavar” Audiencia Papa León XIV, Plaza de san Pedro.
Queridos hermanos y hermanas:
“La cruz de Jesús es el mayor descubrimiento de la vida,
el valor que modifica todos los valores” “Esperar es excavar. Elena
emperatriz”, basada en el evangelio de Mateo 13, 44. “Cuando éramos niños,
meter las manos en la tierra tenía un encanto especial. Lo recordamos y quizá
aún lo observamos: ¡nos hace bien observar el juego de los niños! Cavar en la
tierra, romper la dura corteza del mundo y ver lo que hay debajo” en la
Parábola del tesoro en el campo, lo que Jesús describe “ya no es un juego de
niños”; “la alegría de la sorpresa es la misma”.
En ese sentido, “tan pronto como tuvieron la libertad de
vivir públicamente como cristianos, los discípulos de Jesús comenzaron a
excavar, en particular en los lugares de su pasión, muerte y resurrección”.
Recordando a Flavia Julia Elena, madre
del emperador Constantino, a quien la tradición la recuerda como “el alma de
esas investigaciones”, “una mujer que busca. Una mujer que excava. El tesoro
que enciende la esperanza es, de hecho, la vida de Jesús: hay que seguir sus
huellas”
“¡Cuántas otras cosas podría haber hecho una emperatriz! Qué
lugares nobles podría haber preferido a la periférica Jerusalén. Cuántos
placeres y honores de la corte”, Por eso, que también nosotros, “podemos
acomodarnos en las posiciones alcanzadas y en las riquezas” que dan seguridad,
pero “así se pierde la alegría que teníamos de niños, ese deseo de excavar e
inventar que hace que cada día sea nuevo”. ‘Inventar’ en latín significa
‘encontrar’, el Santo Padre aseguró que “el gran ‘invento’ de Elena fue el
hallazgo de la Santa Cruz”.
“¡He aquí el tesoro escondido por el que venderlo todo!”, “la
cruz de Jesús es el mayor descubrimiento de la vida, el valor que modifica
todos los valores”. El origen humilde de Elena, quien “había llevado su
propia cruz durante mucho tiempo”, sufriendo dolores y decepciones. Sin
embargo, “Elena siempre fue fiel a sí misma: una mujer en busca de algo.
Había decidido convertirse al cristianismo y siempre practicó la caridad, sin
olvidar nunca a los humildes de los que ella misma procedía”.
Tanta dignidad y fidelidad a la conciencia, queridos
hermanos y hermanas, cambian el mundo también hoy: acercan al tesoro, como el
trabajo agricultor”. “Cultivar el propio corazón
requiere esfuerzo. Es el trabajo más grande. Pero cavando se encuentra,
bajándose se acerca cada vez más a ese Señor que se despojó de sí mismo para
hacerse como nosotros.
Su Cruz está bajo la corteza de nuestra tierra” “Podemos
caminar con orgullo, pisoteando distraídamente el tesoro que hay bajo nuestros
pies. Si, en cambio, nos volvemos como niños, conoceremos otro Reino, otra
fuerza. Dios está siempre debajo de nosotros, para levantarnos en alto” Fuente:
Aciprensa. Com. Imagen de Vatican. Va.