HACER LA VOLUNTAD DE DIOS Evangelio martes 23 de septiembre 2025

SERÁN SU FAMILIA QUIENES HAGAN LA VOLUNTAD DE DIOS                                               
Evangelio martes 23 de septiembre 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“La madre y los hermanos de Jesús fueron a verlo, pero no pudieron acercarse a causa de la multitud. Entonces le anunciaron a Jesús: “Tu madre y tus hermanos están ahí afuera y quieren verte”.
Pero Él les respondió: “Mi madre y mis hermanos son los que escuchan la Palabra de Dios y la practican”. Lucas 8, 19-21
 
            Hacer la voluntad de Dios, vivir según la Palabra de Dios, obedecer a lo que indique el Espíritu de Dios, moverse en el ambiente de Dios es la propuesta para ser esa gran familia que desea Dios. El concepto de familia es mas amplio cuando se trata de seguir los caminos de Dios. El Nazareno no permite que se limite lo que él está pensado para el futuro de la humanidad, ser esa GRAN FAMILIA DE DIOS Con base en su voluntad.
 
Hay que evitar todo aquello que no permita vivir como esa gran familia, por ejemplo:  Jesucristo sabe quiénes no hacen la voluntad de Dios y Él mismo demuestra la maldad de sus obras. Razón por la cual no asiste a la fiesta de las tiendas. (cfr. Juan 7, 2-8). El Salvador del mundo le enseña a Pedro que nadie debe detener su misión. Su enseñanza es: “Tu piensas como los hombres y no como Dios”. (Marcos 8, 33).
 
Jesucristo insiste en que su misión es universal, Él tiene la idea de esa gran familia en el mundo, razón para decirle a sus discípulos: “Debemos predicar por todas partes, para eso hemos sido enviados”. (Marcos 1, 38). La amenaza de muerte no impide que Jesucristo cumpla la voluntad de su Padre.
 
Por encima del odio de Herodes, sigue cumpliendo su misión. (Lucas 13, 31-33). Jesucristo tiene un concepto universal de las ovejas. Su misión llega a buscar las que todavía no son parte de su redil. Su sueño es un solo rebaño con un solo pastor. Ese sueño nadie se lo puede impedir. (Juan 10, 16-18).
 

            El Papa Francisco nos recuerda que hacer la voluntad de Dios para Jesucristo era como el alimento, lo que le daba fuerza, lo que le permitía seguir adelante». «Yo he venido al mundo para hacer la voluntad del que me ha enviado (cfr. Juan 6, 38), para realizar una obra de obediencia. Jesucristo rechaza las propuestas del demonio porque no conducen a la voluntad de Dios. (cfr. Mateo 4, 1-11). «Cuando el Padre, cuando Jesús nos pide algo», hay que preguntarse: «¿Es esta su voluntad?».

 
Cierto, «son cosas difíciles, y nosotros no somos capaces, con nuestras fuerzas, de aceptar lo que el Señor nos dice». Pero una ayuda para hacerlo está en la oración: «Señor, dame la valentía, dame la fuerza para seguir adelante, según la voluntad del Padre». (cfr. Homilía, 27 de enero, 2015).
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https://youtu.be/aNFS1iAIw4M