VIVIMOS NUESTRA FE EN CLAVE DE MISERICORDIA Evangelio Viernes 24 de Junio 2022
VIVIMOS
NUESTRA FE EN CLAVE DE MISERICORDIA
Evangelio
Viernes 24 de junio 2022 Padre,
Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué “Jesús
dijo a los fariseos y a los escribas una parábola: «¿Quién de vosotros que
tiene cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las 99 en el desierto, y va
a buscar la que se perdió hasta que la encuentra? Y cuando la encuentra, la
pone contento sobre sus hombros; y llegando a casa, convoca a los amigos y
vecinos,y les dice: "Alegraos
conmigo, porque he hallado la oveja que se me había perdido." Os digo que,
de igual modo, habrá más alegría en el cielo por un solo pecador que se
convierta que por 99 justos que no tengan necesidad de conversión.” Lucas 15,
3-7. Aprendemos a vivir nuestra fe, la
vida cristiana, nuestra religión católica, en clave de misericordia. Es uno
de los excelentes métodos que el Maestro de los Maestro propuso para poder
anunciar el Reino de su Padre celestial. La respuesta ante el lenguaje de
Jesucristo para con el mundo judío, justo cuando les proclamó el pasaje de la
profecía de Isaías fue: “Se quedaban admirados por su lenguaje de
misericordia”. (Lucas 4, 21). Cada persona descubre su fragilidad, su
pequeñez, su humildad, cuando escucha y medita atentamente de dónde viene la
grandeza, el poder y la misericordia de Dios. La misericordia es el criterio
para saber con seguridad, ¿Quiénes son los verdaderos hijos de Dios? Aquello
que la sociedad critica como de mal gusto, o no acorde a un Hijo de Dios, el Hijo
de Dios lo convierte en reto para la salvación y practicar la misericordia.
Aquello que la sociedad desprecia e instiga, es precisamente lo que debe
acoger, lo que se debe pensar con el corazón en la mano. La semántica de la
cláusula latina se hace sentir: “Miseris – Cor – dare” (dar el corazón a los
míseros). Es lo que Dios acostumbra a hacer.La misericordia está por encima de cualquier
otro criterio. El Papa Francisco enseña que la
misericordia es el latido mismo del corazón de Dios. La misericordia de Dios va
más allá de la ley, no humilla ni maltrata, es una caricia sobre las
heridas de nuestros pecados.La
misericordia es el modo con que Dios perdona.La misericordia va más allá y hace la vida de una persona de tal modo
que el pecado es arrinconado. (Homilía, 8 de abril 2018). El Sagrados Corazón
de Jesús, es como el emblema de su amor, es su presencia de amor y misericordia
por la humanidad. Desde el corazón del Maestro, nace la Iglesia, se abren
las puertas del cielo. El corazón de Jesús cura nuestra conciencia. El
corazón de Dios: purifica, ilumina y unifica nuestra vida cristiana. El corazón
del Salvador del mundo, es principio y término de nuestra reconciliación.