Evangelio domingo 29 de
septiembre 2024
Padre, Jairo Yate Ramírez.
Arquidiócesis de Ibagué
“Juan le
dijo a Jesús: “Hemos visto a uno que expulsa a los demonios en tu nombre, y
como no es de los nuestros, se lo prohibimos”. Jesús le respondió: “No se lo
prohíban, porque no hay ninguno que haga milagros en mi nombre, que luego sea
capaz de hablar mal de mí. Todo aquel que no está contra nosotros, está a
nuestro favor.
Todo aquel que les dé a beber un
vaso de agua, por el hecho de que son de Cristo, les aseguro que no se quedará
sin recompensa.
Al que sea ocasión de pecado para
esta gente sencilla que cree en mí, más le valdría que le pusieran al cuello
una de esas enormes piedras de molino y lo arrojaran al mar. Si tu mano te es
ocasión de pecado, córtatela; pues más te vale entrar manco en la vida eterna,
que ir con tus dos manos al lugar de castigo, al fuego que no se apaga.” °°°
Marcos 9, 38-43. 45. 47-48.
Querer
cumplir la misión que el Maestro nos propone sin tener en cuenta el camino de
la Cruz, el valor de la Cruz, las enseñanzas de la Cruz, es un imposible. Desde el momento en que un creyente se aparta
de la Cruz, aparecen las contradicciones, las divergencias, las persecuciones
con los demás, algunos se creen dueños exclusivos de la misión, e incluso
únicos con los poderes de Dios. El Maestro de Nazareth nos va a recordar: “Todo
aquel que no está contra nosotros, está a favor nuestro”.
La
Cruz nos va a permitir realizar la misión con los mismos sentimientos del Hijo
de Dios. El apóstol san Pablo enseña a quienes viven en Filipo quienes son
los que no viven según el modelo de la Cruz: “Os lo repito con lágrimas en los
ojos: hay muchos que con su manera de proceder se muestran enemigos de la
cruz de Cristo:
Ellos no
tienen otro paradero que la perdición, su dios es el estómago, ponen toda su
gloria en sus vergüenzas, y solo se preocupan por las cosas de la tierra”.
(Filipenses 3, 17 - 4,1). “Lejos de mí
gloriarme si no es de la cruz de nuestro Señor Jesucristo: en ella el mundo
quedó crucificado para mí, y yo crucificado para el mundo”. (Gálatas 6, 14).
El
Papa Francisco nos invita a valorar nuestra salvación desde la contemplación de
un Cristo crucificado. Jesús, "elevado sobre el mástil de la cruz, no
permite que las serpientes venenosas que nos acechan nos conduzcan a la
muerte".
"Ante nuestras bajezas, Dios
nos da una nueva estatura; si tenemos la mirada puesta en Jesús, las mordeduras
del mal no pueden ya dominarnos, porque Él, en la Cruz, ha tomado sobre sí el
veneno del pecado y de la muerte, y ha derrotado su poder destructivo"
(cfr. Homilía, 14 de septiembre, 2022).
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