29 de noviembre de 2024

DISCÍPULOS EN COMUNIÓN CON EL MAESTRO Evangelio sábado 30 de noviembre 2024


DISCÍPULOS EN COMUNIÓN CON EL MAESTRO.          
Evangelio sábado 30 de noviembre 2024
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Mientras caminaba a orillas del mar de Galilea, Jesús vio a dos hermanos: a Simón, llamado Pedro, y a su hermano Andrés, que echaban las redes al mar porque eran pescadores.         Entonces les dijo: “Síganme, y Yo los haré pescadores de hombres”. Inmediatamente, ellos dejaron las redes y lo siguieron.
 
            Continuando su camino, vio a otros dos hermanos: a Santiago, hijo de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca con Zebedeo, su padre, arreglando las redes; y Jesús los llamó. Inmediatamente, ellos dejaron la barca y a su padre, y lo siguieron.” Mateo 4, 18-22.
 
            La Quinta Conferencia Episcopal Latinoamericana y del caribe, celebrada en la ciudad de Aparecida, Brasil, en el año 2007, nos pide y nos recuerda que estamos llamados a ser discípulos misioneros (cfr. Numeral 10). Para lograr ser ese ideal de discípulo es necesario un encuentro personal y comunitario con Jesucristo. (cfr. Numeral 11).
 
El Hijo de Dios elige a sus seguidores para que estén con Él, para que compartan su vida con Él, para que aprendan de Él, para que cumplan una buena misión, pero en comunión con él.  Quienes le han dicho sí a Dios y han cumplido con la norma de estar con el Maestro, han logrado el éxito. Lo siguen a Él y dejan todos los apegos a las cosas de este mundo, para lograr el propósito. (cfr. Mateo 4, 21-22).
 
            La Escritura nos recuerda que el Salvador del mundo inició su ministerio, llamó a doce señores, para que vivieran en comunión con Él. (cfr. Marcos 3, 14). Si una persona logra vivir en comunión con su Maestro, está en capacidad para vivir en hermandad con los demás y estar en constante misión. Para tener el éxito es necesario ajustarse a un proceso. Jesús de Nazareth nos indica cuáles son los pasos de dicho proceso.
 
            El primero es el encuentro con Jesucristo. Dios llama y espera una respuesta nuestra. (cfr. Marcos 1, 14). El anuncio del Kerigma y la acción misionera dan fundamento a este primer paso. El segundo es la conversión. Quienes escuchan el llamado se comprometen a cambiar su forma de ser y de pensar. (cfr. Mateo 4, 17).
 
El tercero es la comunión.  No existe vida cristiana si no es en comunidad. Vivir en armonía unos con otros. (1 Pedro 3, 8). El cuarto es la misión. El discípulo sale al mundo a anunciar a un Jesús muerto y resucitado. (Marcos 16, 15) (cfr. Conferencia Aparecida, numeral 278).
 
            Un discípulo de Juan el Bautista fue el primero en ser llamado por el Maestro, es hermano de Pedro y patrono de la Iglesia Ortodoxa. Su nombre es Andrés. San Juan Crisóstomo decía: “Andrés no escondió el tesoro para sí solo, fue en busca de su hermano para hacerlo partícipe de su descubrimiento”.
SI DESEAS ESCUCHAR EL AUDIO DE ESTA REFLEXIÓN HAZ CLICK AQUÍ    
https://youtu.be/zzFHo7RhfKI