SOMOS MENSAJEROS DE DIOS Evangelio lunes 13 de enero 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“Después
que Juan Bautista fue arrestado, Jesús se dirigió a Galilea. Allí proclamaba la
Buena Noticia de Dios, diciendo: “El tiempo se ha cumplido: el Reino de Dios
está cerca. Conviértanse y crean en la Buena Noticia”.
Y avanzando un poco, vio a Santiago,
hijo de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban también en su barca
arreglando las redes. En seguida los llamó, y ellos, dejando en la barca a su
padre Zebedeo con los jornaleros, lo siguieron.” Marcos 1, 29-39.
Avanza
el Reino de acuerdo al espíritu y a los deseos del Padre celestial. San
Juan el bautista cumplió perfectamente su misión. El Hijo de Dios comienza su
vida pública, pone en práctica el mandato de su Padre celestial. “Instaurar el
Reino de Dios”. Para lograrlo, pone su confianza en los seres humanos. Llama a
los 4 primeros discípulos: Simón y su
hermano Andrés. Santiago y su hermano Juan.
La mayor intención de Dios es salvar la
humanidad. Se le
ocurre poner al servicio de la raza humana, los medios para la salvación.
“Conviértanse y crean en la Buena Noticia.”
Dios necesita mensajeros para que anuncien su Palabra y sean testimonio
de su misión. Dice la Escritura: “Dejándolo todo, siguieron al Maestro” (Marcos
1, 39).
En
san Juan el Bautista encontramos las cualidades y virtudes de un futuro
comunicador del Reino de Dios. Juan era, muy estricto en su forma de vivir,
muy seguro de la misión que estaba cumpliendo: “Ser el precursor de
Cristo”. Juan, es el mensajero de la
luz, él nos cuenta quién es Jesús, cuál es su misión, cómo prepararse para
recibir la llegada de Jesús: “Conviértanse, porque ha llegado el Reino de los
cielos” (Mateo 3, 2).
Juan,
“se caracterizó por su austeridad, es considerado según los estudiosos de
la Sagrada Biblia, como el último de los profetas de la Antigua Alianza y el
precursor del Señor, pues a él le correspondió preparar los caminos del Mesías
esperado. Fue una persona muy humilde,
en el sentido que asumió de todo corazón su misión, la llevó hasta sus últimas
consecuencias.
El
Papa Francisco nos enseña que nuestra misión debe ser: Hablar de Dios y
testimoniar el mensaje de Dios. Ser ciudadanos honestos y constructivos.
Testimoniar que Dios es el centro y el sentido de nuestra vida. (cfr. Ángelus,
18 de octubre, 2020).
SI DESEAS ESCUCHAR EL AUDIO DE ESTA REFLEXIÓN
HAZ CLICK AQUÍ