13 de abril de 2025

EL VERDADERO AMOR NO VA CON LA HIPOCRESÍA Lunes Santo 14 de abril 2025


LUNES SANTO 14 de abril 2025

El lunes es considerado en nuestra Iglesia Católica el día de la autoridad. Jesucristo derrota la hipocresía de Judas Iscariote diciendo: “Déjala; lo tenía guardado para el día de mi sepultura.”
“La autoridad es abnegación, servicio humilde, testimonio, ternura maternal
y paternal hacia las personas, especialmente aquellas más necesitadas.”
Papa Francisco, 10 de noviembre, 2024
 
ENSEÑANZAS QUE NOS REGALA EL LUNES SANTO
Seguimos el ejemplo de un Dios grande, maravilloso, poderoso y muy misericordioso. “Mi siervo no gritará, no voceará por las calles” (cfr. Isaías 42, 1-7)
El Papa Francisco enseña que Judas Iscariote sufría del virus del orgullo y la ambición. Llegó un momento en que ya no eran doce apóstoles, sino once, ante el doloroso evento de la Pasión del Señor. (cfr. Juan 12, 1-11)
 
EL VERDADERO AMOR NO VA CON LA HIPOCRESÍA        
Evangelio Lunes 14 de abril 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
 
            “Seis días antes de la Pascua, fue Jesús a Betania, donde vivía Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Allí le ofrecieron una cena; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban con él a la mesa. María tomó una libra de perfume de nardo, auténtico y costoso, le ungió a Jesús los pies y se los enjugó con su cabellera. Y la casa se llenó de la fragancia del perfume.
Judas Iscariote, uno de sus discípulos, el que lo iba a entregar, dice:
«¿Por qué no se ha vendido este perfume por trescientos denarios para dárselos a los pobres?». Esto lo dijo no porque le importasen los pobres, sino porque era un ladrón; y como tenía la bolsa, se llevaba de lo que iban echando.
Jesús dijo: «Déjala; lo tenía guardado para el día de mi sepultura.” °°° Juan 12, 1-11
 
            El amor rompe las barreras del egoísmo, la falsedad, la hipocresía, la apariencia de la caridad. Judas Iscariote es un personaje que no dejó buena impresión en el proceso de la formación, la paciencia y el amor misericordioso de su Maestro. Judas representa a todas aquellas personas que viven de la apariencia, que son mentirosas, que se mueven en la ambición por el dinero, que no tienen reparo en vender a sus amigos con tal de sentir el gozo de su propia debilidad. Jesucristo nos enseña: No son necesarias las apariencias. “Los pobres siempre los tendrán con ustedes” No utilice las personas para su beneficio personal.
 
            El Papa Francisco enseña que Judas Iscariote sufría del virus del orgullo y la ambición. Llegó un momento en que ya no eran doce apóstoles, sino once, ante el doloroso evento de la Pasión del Señor. Judas, Ya había comenzado antes a separarse de la comunión con el Señor y con los demás, a hacer las cosas solo, a aislarse, a aferrarse al dinero hasta el punto de instrumentalizar a los pobres, a perder de vista el horizonte de la gratuidad y de la entrega hasta permitir que el virus del orgullo infectase su mente y su corazón, transformándolo de "amigo" (Mateo 26, 50) en enemigo y en "guía de los que arrestaron a Jesús" (Hechos 1, 17)
 
            Judas, dejó de pertenecer a Jesús con su corazón y se colocó fuera de la comunión con Él y con los suyos. Dejó de ser discípulo y se puso por encima del Maestro. Lo vendió y con el "precio del crimen" compró un terreno que no produjo frutos, sino que se impregnó con su sangre (cfr. Hechos 1, 18-19). (cfr. Audiencia, 12 de junio, 2019).
SI DESEAS ESCUCHAR EL AUDIO DE ESTA REFLEXIÓN HAZ CLICK AQUÍ   
https://youtu.be/LeZ6DypPN3M      
 
Obedientes a la propuesta del Papa Francisco, reflexionaremos cada día de la Semana Mayor un tema sobre la virtud de la Esperanza. Hoy Lunes Santo pensamos en °°°  
 

EL AMOR Y LA ESPERANZA
Virtudes que nos permiten vivir mejor
Ser solidarios y honestos con los demás
Jubileo Año 2025
 
Aprovechemos este segundo día de nuestra Semana Santa, para pensar en la importancia de entender que el amor es hacer siempre el bien. La esperanza es la virtud que nos permite la ilusión que no existan más Judas en la sociedad que utilizan a las demás personas y solo piensan en sus propias ambiciones. “Trate a los demás, como le gustaría que lo trataran a usted”.
 
            El apóstol san Pablo nos recomienda: no viváis como los gentiles, que viven en la vanidad de sus pensamientos. Están oscurecidos en el entendimiento y separados de la vida de Dios por la ignorancia en que se encuentran, por el endurecimiento de su corazón.” (Efesios 4, 17-19).  Judas Iscariote manipuló a su Maestro. La Escritura nos aconseja no caer en ese tipo de pecado. 
 
Hay seis cosas que detesta el Señor, y hasta siete que le causan horror: la mirada despreciativa, la lengua mentirosa, las manos que derraman sangre inocente, el corazón que medita intenciones culpables, los pies que corren impacientes a hacer el mal, el testigo falso que habla para mentir, y el hombre que provoca la discordia entre hermanos.” (Proverbios 6, 16-19).
 
El Papa Francisco desea que Viralicemos el amor y globalicemos la Esperanza a la luz de la fe. Una sociedad solidaria y justa es una sociedad más sana. Una sociedad participativa -donde a los 'últimos' se les tiene en consideración igual que a los 'primeros.
            Animados por el Espíritu Santo, podremos trabajar juntos por el Reino que Cristo ha inaugurado en este mundo, viniendo entre nosotros. 

Un Reino de luz en medio de la oscuridad, de justicia en medio de tantos ultrajes, de alegría en medio de tantos dolores, de sanación y salvación en medio de las enfermedades y la muerte. De ternura en medio al odio. (cfr. Audiencia, 30 de septiembre 2020).
 
            El Papa Francisco recuerda que el amor está más en las obras que en las palabras. No es amor decir solamente: “te amo, amo a todas las personas”. No. ¿Qué haces por amor? El amor se da”. Podemos hacer esto porque de esta manera ama Dios a su pueblo, cuando lo escogió y también cuando lo perdonó. La segunda dimensión que identifica el Papa es la manera de poner en acción este amor concreto: la dimensión del diálogo. El amor, de hecho, “escucha y responde, el amor se realiza en el diálogo, en la comunión: se comunica” El amor no es sordo, ni mudo. (cfr. Discurso, 21 de junio, 2015).