EL MAESTRO ES LUZ, TU ERES
MENSAJERO DE LA LUZ
Evangelio lunes 7 de abril 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez.
Arquidiócesis de Ibagué
“Jesús dirigió la
palabra a los fariseos, diciendo:
“Aunque Yo doy testimonio de mí, mi testimonio vale porque sé de dónde
vine y a dónde voy; pero ustedes no saben de dónde vengo ni a dónde voy.
Ustedes juzgan según
la carne; Yo no juzgo a nadie, y si lo hago, mi juicio vale porque no soy Yo
solo el que juzga, sino Yo y el Padre que me envió.
En la Ley de ustedes
está escrito que el testimonio de dos personas es válido. Yo doy testimonio de
mí mismo, y también el Padre que me envió da testimonio de mí”. °°°
Juan 8,
12-20.
Jesucristo
se propone como el mensaje de la luz. El ejemplo de Aquel que ilumina la vida
de la sociedad. La luz que rompe el esquema de las tinieblas. El Nazareno
invita a todos sus seguidores a ser mensajeros de esa luz que es su Iglesia,
sus sacramentos, su Palabra. Lo lograrán aquellos que sigan paso a paso los
consejos de su Maestro.
San
Juan Pablo II nos recuerda esa maravillosa verdad teológica y mesiánica que se
encuentra en el Evangelio: Jesucristo le dice a la humanidad, quién es Él.
Se presenta a sí mismo. Defiende su procedencia del Padre celestial. Yo he
salido y vengo de Dios. (Juan 8, 42). Jesucristo da testimonio de sí mismo.
(Juan 8, 18). Jesucristo procede del mismo Padre celestial. (Juan 7, 28-29).
Jesucristo hace la voluntad de Aquel que lo envió. (Juan 4, 34). (cfr.
Audiencia, 24 de junio, 1987).
El
profeta Isaías es muy acertado en proponerle a la humanidad su expectativa ante
la llegada del Salvador del mundo como la “Luz”. Dice el profeta: Levántate
y sonríe, Jerusalén, que ya llega tu luz, y brilla en ti la gloria del Señor.
Aunque cubran la tierra las tinieblas y la noche envuelva a las naciones, el
Señor irradia sobre ti su luz, y su gloria se revela en ti. A tu luz acudirán
los pueblos, los reyes buscarán el brillo de tu aurora.” (Isaías 60, 1-6).
El
Papa Francisco enseña que la misión de Jesucristo es ser luz. También la misión
de los apóstoles es llevar la luz. Pablo se lo dijo al rey Agripa: “Fui
elegido para iluminar, para llevar esta luz —que no es mía, es de otro— pero
para llevar la luz” (cfr. Hechos 26,18) (Homilía, 6 de mayo, 2020)
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