12 de abril de 2025

DOMINGO DE RAMOS Jubileo de la Esperanza 13 de abril 2025


13 de abril 2025.
DOMINGO DE RAMOS Jubileo de la Esperanza 2025
“Jesús “no es un iluso que siembra falsas ilusiones, un profeta ‘New Age’,
 un vendedor de humo, todo lo contrario:
es un Mesías bien definido, con la fisonomía concreta del siervo,
el siervo de Dios y del hombre que va a la pasión;
es el gran Paciente del dolor humano”. (Papa Francisco)
 
ENSEÑANZAS QUE NOS REGALA ESTE DOMINGO
            La figura del Siervo nos indica el deseo de Dios para cada uno de nosotros. Ser esos servidores. Jesucristo es el siervo fiel que ganó la salvación con su propio sufrimiento. (cfr. Isaías 50, 4-7)
            Nuestra vida cristiana debe ser según el modelo del Maestro de Nazareth. Siendo de condición divina cumplió su misión desde la humidad y la sencillez de corazón. (cfr. Filipenses 2, 6-11)
            El Hijo de Dios conquista el mundo con la gloria de su sufrimiento. Subió a Jerusalén para cumplir con la misión que el mismo Padre le había encomendado. (cfr. Lucas 23, 1-49)
 
JESUCRISTO CONQUISTA CON SU MUERTE Y RESURRECCIÓN       
Evangelio domingo 13 de abril 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
Pasión de Nuestro Señor Jesucristo según san Lucas: “Llevaron a Jesús ante Pilato. Allí empezaron con sus acusaciones: «Hemos comprobado que este hombre es un agitador. Se opone a que se paguen los impuestos al César y pretende ser el rey enviado por Dios.» Entonces Pilato lo interrogó en estos términos: «¿Eres tú el rey de los judíos?» Jesús le contestó: «Tú eres el que lo dice.» Pilato se dirigió a los jefes de los sacerdotes y a la multitud. Les dijo: «Yo no encuentro delito alguno en este hombre.»
 
Pero ellos insistieron: «Está enseñando por todo el país de los judíos y sublevando al pueblo. Comenzó en Galilea y ha llegado hasta aquí.» Al oír esto, Pilato preguntó si aquel hombre era galileo. Cuando supo que Jesús pertenecía a la jurisdicción de Herodes, se lo envió, pues Herodes se hallaba también en Jerusalén por aquellos días.
 
Al ver a Jesús, Herodes se alegró mucho. Hacía tiempo que deseaba verlo por las cosas que oía de él, y esperaba que Jesús hiciera algún milagro en su presencia. Le hizo, pues, un montón de preguntas. Pero Jesús no contestó nada.” °°° Lucas 23, 1-49.
 
Un domingo, nos detenemos a meditar la presencia del Hijo de José y María en la ciudad santa de Jerusalén. Disponemos nuestro espíritu y corazón para vivir el acontecimiento cumbre de nuestra fe católica-cristiana. Jesucristo tuvo la osadía de conquistar el mundo con la gloria de su propio sufrimiento.
            El Hijo de Dios conquista el mundo con la gloria de su sufrimiento. Subió a Jerusalén para cumplir con la misión que el mismo Padre le había encomendado; al llegar se encuentra con la gran sorpresa: “Es aclamado como Mesías, como el salvador del mundo.” (Lucas 19, 37-38).
 
            El dolor y el sufrimiento ocupan un puesto importantísimo en la historia de la salvación. Los católicos logramos entender más el sentido de la Cruz y del dolor, por sus efectos. Jesucristo pone la humanidad a pensar en el motivo que era necesario que alguien muriera por la salvación de muchos. El profeta Isaías nos permite entender el valor de Aquel Siervo que se entrega y asume el sufrimiento en aras de la salvación universal. “He ofrecido mi espalda a los que me golpeaban, mis mejillas a quienes me tiraban la barba, y no oculté mi rostro ante las injurias y los escupos.” Isaías 50, 6).
 
            Con la humildad, la obediencia y la sencillez, Jesucristo asume la muerte por la salvación del mundo. (cfr. Filipenses 2, 8). El Papa Francisco nos recuerda: “Jesús entró en Jerusalén como un Rey humilde y pacífico: ¡abrámosle nuestro corazón! Sólo Él puede librarnos de la enemistad, del odio y de la violencia, porque Él es la misericordia y el perdón de los pecados.” (cfr. Ángelus, 24 de marzo, 2024)
SI DESEAS ESCUCHAR EL AUDIO DE ESTA REFLEXIÓN HAZ CLICK AQUÍ 
https://youtu.be/TMYBpdnYft0     
 
 
Obedientes a la propuesta del Papa Francisco, reflexionaremos cada día de la Semana Mayor un tema sobre la virtud de la Esperanza. Hoy domingo de ramos pensamos en °°° 

EL VALOR DE LA ESPERANZA
ANTE LOS MOMENTOS DIFÍCILES Y DOLOROSOS
Jubileo Año 2025
 
Aprovechemos este primer día de la Semana Santa, domingo de ramos, para meditar en consonancia con el acontecimiento, la importancia que tiene la esperanza para poder comprender y asumir los momentos difíciles de nuestras vidas.
 
El Papa Francisco nos enseña que la Esperanza, es la más pequeña de las virtudes, pero la más fuerte. La esperanza, por lo tanto, no es algo, sino alguien, tal como San Francisco exclama en las Alabanzas del Dios Altísimo: "¡Tú eres nuestra esperanza! (FF 261). Y "No abandonará a todos los que esperan en él". (FF 287; cf. Sal 33:23).
 
            La Esperanza es una virtud oculta, tenaz y paciente:  "Es la más humilde de las tres virtudes teologales, porque permanece oculta" "Es una virtud que nunca decepciona: si esperas, nunca serás decepcionado", es una virtud concreta, "de cada día porque es un encuentro. Y cada vez que nos encontramos con Jesús en la Eucaristía, en la oración, en el Evangelio, en los pobres, en la vida comunitaria, cada vez que damos un paso más hacia este encuentro definitivo" (Homilía casa Santa Marta, 23 de octubre de 2018).
 
"La Esperanza necesita paciencia", así como uno necesita tener paciencia para ver crecer el grano de mostaza. Es "paciencia para saber que sembramos, pero es Dios quien da el crecimiento" (Homilía de Santa Marta, 29 de octubre de 2019). La esperanza no es un optimismo pasivo sino, por el contrario, "es combativa, con la tenacidad de quienes van hacia un destino seguro" (Ángelus, 6 de septiembre de 2015).
 
            La Esperanza siempre está presente en todos los corazones. está siempre presente en todas las culturas y en todas las épocas, y su significado se adhiere, moldeándose, al pensamiento y a la cultura de los diferentes pueblos, en el tiempo y en las latitudes. Habiendo eliminado su significado de virtud teológica en el cristianismo, su concepto se vuelve esquivo, positivo y negativo al mismo tiempo, basta pensar en los proverbios de la sabiduría popular: "la esperanza es la última en morir" o "el que vive en la desesperación de la esperanza muere". Según Giacomo Leopardi, es el mayor bien del hombre porque le permite realizar el placer incluso sólo en su expectativa.

            Abraham es el hombre de la Esperanza. La Biblia está llena de esperanza. Abraham "creía firmemente en la esperanza contra toda esperanza" (Romanos 4, 18). El Papa Francisco señala que Abraham, en un momento de desconfianza, en lugar de pedir el hijo prometido que no vino, "se vuelve a Dios para ayudarle a seguir esperando". No hay nada más hermoso. La esperanza no defrauda" (Audiencia General, 28 de diciembre de 2018). (cfr. Vatican News, María Milvia Morciano).