EL SÁBADO SANTO 19 de abril 2025
Cristo resucitado, ha vencido a la muerte. Cristo ha pasado de la muerte a la Vida. Es la Pascua del Señor. Es la gran celebración de la luz.
“Es la Pascua de Cristo, la fuerza de Dios, la victoria de la vida sobre la muerte,
el triunfo de la luz sobre las tinieblas, el renacimiento de la esperanza
entre los escombros del fracaso.
Es el Señor, el Dios de lo imposible que, para siempre, hizo correr la piedra
y comenzó a abrir nuestros corazones.”
Papa Francisco. 30 de marzo 2024.
Dios crea todas las cosas que existen. Crea al hombre y a la mujer y queda complacido de la perfección de su obra. (cfr. Génesis 1, 1-2, 2)
Dios se hace presente en la historia de hombres y mujeres. Abraham es un gran ejemplo de aquella persona que responde al llamado de Dios. (cfr. Génesis 22, 1-18)
Israel siempre recordará y llevará en su corazón el momento cumbre de su historia. Es la pascua. El paso de la esclavitud a la libertad. (cfr. Éxodo 14, 15 – 15, 1)
Dios pone para el servicio de la humanidad, las riquezas, gracias y bondades, que trae la salvación. (cfr. Isaías 54, 5-14)
Dios ofrece salvación y cumple su Alianza con la humanidad: “Escuchadme atentos y comeréis bien, saborearéis platos sustanciosos. Inclinad vuestro oído, venid a mí: escuchadme y viviréis.” (cfr. Isaías 55, 1-11)
Dios nos invita a abandonar el pecado y dejarnos guiar por los caminos de salvación. (cfr. Baruc 3, 9-15. 32 – 4,4)
La conducta idolátrica y no conforme a la ley, desacredita el nombre de Dios. Nuestra fe se debe conservar limpia ante Dios. (cfr. Ezequiel 36, 16-17ª. 18-28)
De la misma manera que Cristo resucitó de entre los muertos para la gloria del Padre, así también nosotros debemos andar en una vida nueva. (cfr. Romanos 6, 3-11.
¿Por qué buscan entre los muertos al que está vivo? No está aquí. Ha resucitado. (cfr. Lucas 24, 1-12).
LA PASCUA ES EL GRAN DÍA DE LA ESPERANZA
Evangelio sábado 19 de abril 2025
Padre, Jairo Yate Ramírez. Arquidiócesis de Ibagué
“El primer día de la semana, muy de
mañana, fueron al sepulcro llevando los aromas que habían preparado. Pero
encontraron que la piedra había sido retirada del sepulcro, y entraron, pero no
hallaron el cuerpo del Señor Jesús. No sabían que pensar de esto, cuando se
presentaron ante ellas dos hombres con vestidos resplandecientes.
Como ellas tenían
miedo e inclinaron el rostro a tierra, les dijeron: «¿Por qué buscan entre los
muertos al que está vivo? No está aquí, ha resucitado. Recuerden cómo les habló
cuando estaba todavía en Galilea, diciendo: "Es necesario que el Hijo del
hombre sea entregado en manos de los pecadores y sea crucificado, y al tercer
día resucite. "» °°° Lucas 24, 1-12.
La resurrección trae consigo los dones y las Gracias de Dios para la nueva vida del mundo: El primer don es la paz como Gracia de Dios y responsabilidad nuestra de cultivarla “Paz a vosotros”. El segundo don: Se inicia una misión, hombres y mujeres somos enviados a proclamar ese mensaje de reconciliación y unidad. El tercer don: El Espíritu Santo cumple la misión de darnos la sabiduría y la fortaleza para continuar la obra que Cristo dejó.
El cuarto don: El poder de perdonar pecados emana del resucitado. Los pecados se perdonan en nombre de Cristo.
SI DESEAS ESCUCHAR EL AUDIO DE ESTA REFLEXIÓN HAZ CLICK
https://youtu.be/o8EMin8mTSE
MARÍA SANTÍSIMA
MODELO DE LA VIRTUD DE LA ESPERANZA
“María nos invita a vivir según la Fe,
la Esperanza y la Caridad”
Jubileo Año 2025
Nos ubicamos en el séptimo día
ante la celebración de nuestra Semana Santa. Hoy centramos nuestra atención en María
Santísima, nuestra madre celestial, nuestro ejemplo y modelo de virtudes. Mo delo
de aquella persona que creyó y se dejó guiar por la fe desde un primer momento.
Aquella mujer obediente al mandato del creador. Aquella persona que hizo la
voluntad de Dios, nunca perdió la Esperanza, al contrario, acompañó a su Hijo
en todo momento, hasta el doloroso encuentro con la Cruz y acompañó a los
apóstoles después de la resurrección del Maestro. En María, la Esperanza fue
siempre el soporte de su hermosa misión.
la Santísima
Virgen María por su generosa respuesta, el “Sí” la esperanza de los siglos se ve cumplida, y Aquél a quien
Israel esperaba desde antiguo entra en el mundo, entra en nuestra historia.
Acerca de Él, el ángel había anunciado que su Reino no tendría fin (cfr. Lucas
1,33). ¿Quién mejor que María podría
ser para nosotros estrella de esperanza, Ella que con su «sí » abrió la puerta
de nuestro mundo a Dios mismo.